tag:blogger.com,1999:blog-78049472024-03-12T20:24:59.226-07:00Orlando Mazeyra Guillén«Salieron, y si en Dahlmann no había esperanza, tampoco había temor. Sintió, al atravesar el umbral, que morir en una pelea a cuchillo, a cielo abierto y acometiendo, hubiera sido una liberación para él, una felicidad y una fiesta, en la primera noche del sanatorio, cuando le clavaron la aguja. Sintió que si él, entonces, hubiera podido elegir o soñar su muerte, ésta es la muerte que hubiera elegido o soñado» (Jorge Luis Borges, El Sur).Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.comBlogger650125tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-21932549878487475302023-09-27T11:49:00.003-07:002023-09-27T11:49:35.317-07:00Presentación del libro ITINERARIO DE LA MELANCOLÍA<p> <span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; text-align: justify;">El viernes 29 de septiembre, a las 6.30 de la tarde, en la Biblioteca
Personal de Mario Vargas Llosa (Calle San Francisco 306) se presentará el libro
de relatos </span><b style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; text-align: justify;"><i>Itinerario de la melancolía </i></b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; text-align: justify;">del escritor arequipeño
Orlando Mazeyra Guillén.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES;">Acompañarán al autor, Alfredo Herrera Flores (Director de la Biblioteca
Regional Mario Vargas Llosa), Juan Carlos Soto y Héctor Tintaya.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES;">Según el escritor y crítico José Carlos Yrigoyen: “</span><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Mazeyra
ha bebido de la obra de Oswaldo Reynoso y sigue su legado no con el mimetismo del
hijo obediente, sino con la pasión del vástago que toma algunas luminosas
enseñanzas y continúa su propio camino. También se ha reflejado en Ribeyro, de
quien ha aprendido el dialecto de la frustración y de la decadencia,
ambientadas en los sucuchos y calles dudosas de una Arequipa que se mueve,
grita y ríe como un personaje más. Es decir: se ha reconocido en nuestra
tradición y ha cumplido con el deber de devolverle algo distinto”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Por su parte, Juan Manuel
Robles ha señalado: “Mazeyra es un narrador perenne: la vida ha moldeado su
forma de escribir y la escritura ha determinado los pasos que da en la vida. O
al menos en la vida literaria de su alter ego narrador, que es lo que nos
incumbe. Lejos de Vargas Llosa —el gran referente de todo escritor arequipeño—,
este libro se instala en la mejor tradición peruana del yo: la de Julio Ramón
Ribeyro y sus escritos autobiográficos. De hecho, el autor tiene un talento
ribeyriano escasísimo: ser pesimista y encantador a la vez. Poético y
patético”.<o:p></o:p></span></p>
<span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">Mazeyra desde el año 2012 escribe historias en la revista <b><i>Hildebrandt
en sus trece</i></b>. Ha publicado ocho libros de narrativa breve, entre los
más importantes: <i>Mi familia y otras miserias</i> (Tribal, 2013), <i>Inmunidad
de rebaño</i> (Aletheya, 2021) y <i>El niño de La Arboleda </i>(Pesopluma,
2021). Representó a Arequipa en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara
del año 2021, donde Perú fue invitado de honor. Oswaldo Reynoso, uno de los más
importantes escritores peruanos, lo consideró un “alucinado y auténtico
cuentista”.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjp0mp30wswPg7uOXnIHJHLNB3C8jkIa7v4SZITESX7s5z1VSj2XrKjRmp06NQrw4xcTGASsb40_BTR3vyIGgL5hrTh-ubAYbv9mH806HTCK62bA-LKHHaxonxa_XATS_DAzJ2OaM0Bx8e6wfaS0hSjOyUudvoyOQwVj_37C1OwkKPhBMXGXrCkwA/s1200/PRESENTACI%C3%93N%20LIBRO%20DE%20ORLANDO%20MAZEYRA%20GUILL%C3%89N.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1200" data-original-width="1200" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjp0mp30wswPg7uOXnIHJHLNB3C8jkIa7v4SZITESX7s5z1VSj2XrKjRmp06NQrw4xcTGASsb40_BTR3vyIGgL5hrTh-ubAYbv9mH806HTCK62bA-LKHHaxonxa_XATS_DAzJ2OaM0Bx8e6wfaS0hSjOyUudvoyOQwVj_37C1OwkKPhBMXGXrCkwA/w400-h400/PRESENTACI%C3%93N%20LIBRO%20DE%20ORLANDO%20MAZEYRA%20GUILL%C3%89N.jpeg" width="400" /></a></div><br /></span>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-73920444253388916202022-02-25T06:10:00.002-08:002022-02-25T06:10:41.572-08:00El niño de La Arboleda: una botella arrojada al mar...<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgNSylfZRqKNFKpp8D6Iq_HJg4ENBht-duSORlmOrc6U8WdCZayLTwRmzk1FGunobcL_sB74zQeu4EdcbZxuRGqaA5h3ZQiUHulkN8MMzFtXSmIaa117Qb1ei7f_ngEI7a8TVs4pWUiR9pnP1Hn2ZVBtUHIY58NAxgweDBYBGD9kKoDM4aKCfE=s1800" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1800" data-original-width="1800" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgNSylfZRqKNFKpp8D6Iq_HJg4ENBht-duSORlmOrc6U8WdCZayLTwRmzk1FGunobcL_sB74zQeu4EdcbZxuRGqaA5h3ZQiUHulkN8MMzFtXSmIaa117Qb1ei7f_ngEI7a8TVs4pWUiR9pnP1Hn2ZVBtUHIY58NAxgweDBYBGD9kKoDM4aKCfE=s320" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "Candara",sans-serif; mso-bidi-font-family: "Calibri Light"; mso-fareast-language: ES-MX;">Este libro de
Orlando Mazeyra Guillén tiene un parentesco con la película <i>El espejo</i> de </span><span style="font-family: "Candara",sans-serif; mso-bidi-font-family: "Calibri Light"; mso-fareast-language: ES-TRAD;">Tarkovski</span><span style="font-family: "Candara",sans-serif; mso-bidi-font-family: "Calibri Light"; mso-fareast-language: ES-MX;">: una serie de
escenas y situaciones aparentemente inconexas van armando la memoria de un
hombre conflictuado, el espejo de su memoria quebrada. Pasajes y recuerdos de
padres no siempre modélicos o comprensivos, de amores turbulentos que aún
queman, de familiares y amigos que fallan en el peor momento, del oficio de la
escritura que, al igual que el alcohol, puede ser al mismo tiempo una condena y
una salvación, son como las esquirlas de la imagen esquiva de su autor, pero no
una complaciente o idealizada, sino una despojada de todo adorno y, por lo
mismo, certera. Estos relatos, estampas de una vida en realidad, tienen la
limpieza y la fuerza de un latigazo, y nos muestran las cicatrices de quien lo
ha perdido todo en el combate diario, menos la pureza de la infancia y el poder
liberador de la palabra.<i> El niño de La Arboleda </i>es una botella arrojada
al mar que alcanza, resonando, aquella otra costa hacia la cual fue enviada: la
memoria del lector.<o:p></o:p></span></span></p><p>
<b><i><span style="color: red; font-family: Candara, sans-serif; line-height: 107%;"><span style="font-size: medium;">Marco García Falcón</span></span></i></b></p>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-76084451921810448122021-03-27T19:58:00.006-07:002021-03-27T20:14:01.844-07:00INMUNIDAD DE REBAÑO. Historias de la pandemia<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieO1tdZPylPHhPkodJEGmlomBgboZLRDM9ySPcw9VEdaAt416hLRxEGoOTrIjU6xhQmzXEvUBmzTAWXc3lVJIp-T97fcA0ZJpkEA2XJMYZ9zXP4nJdAVSOmkcvirXQk-BdsgAMVQ/s1599/WhatsApp+Image+2021-03-27+at+9.41.00+PM+%25281%2529.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1599" data-original-width="1200" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieO1tdZPylPHhPkodJEGmlomBgboZLRDM9ySPcw9VEdaAt416hLRxEGoOTrIjU6xhQmzXEvUBmzTAWXc3lVJIp-T97fcA0ZJpkEA2XJMYZ9zXP4nJdAVSOmkcvirXQk-BdsgAMVQ/w480-h640/WhatsApp+Image+2021-03-27+at+9.41.00+PM+%25281%2529.jpeg" title="Portada diseñada por Omar Suri" width="480" /></a></div><br /><p></p><div dir="auto" style="background-color: white; color: #050505; font-family: "Segoe UI Historic", "Segoe UI", Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 15px; text-align: justify; white-space: pre-wrap;">Esta tarde, luego de la victoria de Melgar, llegó a casa el editor de Aletheya con los primeros ejemplares de <i><b>Inmunidad de rebaño. Historias de la pandemia</b></i>. Es una edición excelente, la verdad.</div><div dir="auto" style="background-color: white; color: #050505; font-family: "Segoe UI Historic", "Segoe UI", Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 15px; text-align: justify; white-space: pre-wrap;">Quiero agradecer a Martín Kohan, profesor de Teoría Literaria en la Universidad de Buenos Aires y Premio Herralde, por su lectura tan rotunda y esclarecedora; al profesor y crítico Ricardo González Vigil por sus generosas palabras; a Rodolfo Ybarra por ser un ejemplo de compromiso y de lucha cotidiana. <b><i>Inmunidad de rebaño</i></b> trae ilustraciones de Marquiño —a quien uno, antes de la pandemia, solía cruzárselo en los bares de la calle San Francisco o en la tribuna del estadio alentando al Melgar— y no sólo es el más personal de mis libros, sino el más arequipeño (la portada es de Omar Suri). ¡Gracias a todos los que pusieron un granito de arena para que este esfuerzo sea una realidad!</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="color: red; font-size: 16pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;">Sobre este libro:</span></b><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 16pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;"><o:p></o:p></span></b></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: justify; text-indent: 35.45pt;"><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Arial;">En el mundo que componen estos relatos de Orlando Mazeyra
ya existía, desde antes, la sensación de estar todos metidos en el <i>Titanic</i>
(o peor aún: la sensación de ser todos el <i>Titanic</i>). ¿Desde antes? Desde antes
de la pandemia, que es casi el único <i>antes</i> en el que podemos pensar hoy por
hoy. Desde antes existía en estos cuentos la sensación de que nada (ni Dios, ni
la literatura) estaba ahí para asegurar una salvación. Luego llega la pandemia:
a este mundo y a estos cuentos. Llega la cuarentena y llega su después. Y Orlando
Mazeyra extiende su pericia de narrador a otras escenas de la soledad o de la angustia,
de la esperanza o la desesperanza, del encierro o del afuera, de las muertes más
generales o más singulares, del ahogo o el desahogo.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: justify; text-indent: 35.45pt;"><i><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Arial;">Inmunidad de rebaño</span></i><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Arial;"> es la fórmula de una espera. Y es que el arte narrativo de Orlando Mazeyra
no es del orden de la salvación, pero sí de un saber de la espera. Ni consuelo ni
redención: un puro arte del tiempo.<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="color: red; font-size: 15pt; mso-bidi-font-family: Arial;">Martín Kohan, Premio Herralde<o:p></o:p></span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Arial;"> </span></b></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: -.05pt; margin-top: 0cm; margin: 0cm -0.05pt 0cm 0cm; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;"><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;">Narrador nato, Orlando Mazeyra Guillén
convierte en historias el universo que lo rodea, refractado por su rico mundo interior.
Y lo hace con un lenguaje «sencillo, directo, al grano, sin grasa» (ideal creativo,
según lo expresa en «Yo solo voy a rezar»).<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: -.05pt; margin-top: 0cm; margin: 0cm -0.05pt 0cm 0cm; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;"><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;">Sus páginas atrapan al lector, altamente
adictivas.<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: -.05pt; margin-top: 0cm; margin: 0cm -0.05pt 0cm 0cm; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;"> </span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: -.05pt; margin-top: 0cm; margin: 0cm -0.05pt 0cm 0cm; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="color: red; font-size: 16pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;">Ricardo González Vigil</span></b><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 16pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;"><o:p></o:p></span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Arial;"> </span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;"><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; line-height: 107%;">Como
fotogramas de una película que se va armando, estas historias nos devuelven al
escenario de las mascarillas, de los balones de oxígeno, de los hospitales
cochambrosos con médicos y enfermeras envueltos en plásticos de basura y la
falta de medicamentos y camas UCI y la histeria colectiva de las vacunas que no
llegan o llegan a cuentagotas y los noticieros de terror con un presidente
mintiendo en siete lenguas, con nuestra problemática y crisis económica,
política, social y moral. Con jóvenes jugando fútbol sin mascarillas porque ya
todo está perdido y todos tienen a muertos por quienes llorar. Y mejor sonreír,
divertirse, amar, tomarse una cerveza o salir a correr <i>sin permiso de la policía</i> ahora que se puede, ahora que todavía
respiramos y hay vida: aunque no en abundancia, pero vida, al fin y al cabo. […]
Unos relatos de la peste desde el mismo infierno y trazados con agujas
hipodérmicas como quizás lo imaginaron Daniel Defoe o Alessandro Manzoni. <o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-right: -0.05pt; text-align: center;"><b><span face=""Candara",sans-serif" style="color: red; font-size: 16pt;">Rodolfo Ybarra</span></b><b><span face=""Candara",sans-serif" style="color: red; font-size: 16pt; mso-bidi-font-family: Arial;"> <o:p></o:p></span></b></p><p>
<b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-PE; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;">Para adquirir el libro escribir a: mazeyra@gmail.com</span></b></p><p><b><span face=""Candara",sans-serif" style="font-size: 12pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-PE; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES-PE;"><br /></span></b></p>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-34439029314729923582020-07-28T17:40:00.000-07:002020-07-28T17:41:42.130-07:00Presentación de "Unicornios y cocodrilos": jueves 30 de julio a las 7 p.m.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsHoS4rEQlQRqGjjuEzE_eIidPEN0qijnB43HzMR4O5ixath1EJsF_cIxxojRi81QZ17S7dFahXRNnypnRjStD3xOUZ6DXpQ728r26BFpYOoMehD4yDt9mXp1sOVBa6L0QNP0cEA/s1600/frase-corta-presentaci%25C3%25B3n-30-julio.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1600" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsHoS4rEQlQRqGjjuEzE_eIidPEN0qijnB43HzMR4O5ixath1EJsF_cIxxojRi81QZ17S7dFahXRNnypnRjStD3xOUZ6DXpQ728r26BFpYOoMehD4yDt9mXp1sOVBa6L0QNP0cEA/s400/frase-corta-presentaci%25C3%25B3n-30-julio.png" width="400" /></a></div>
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<div style="text-align: justify;">
Este jueves 30 de julio a las 7 de la noche, gracias a <a href="https://www.facebook.com/frasecorta/" target="_blank"><b>Frase Corta</b></a>, presentaremos mi último libro <i><b>Unicornios y cocodrilos</b></i>. Me acompañarán Jasson Ticona, Carlos Rivera y Javier Rivera. ¡Están todos invitados! Transmisión en vivo <b><a href="https://www.facebook.com/frasecorta/" target="_blank">acá</a>.</b></div>
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<b>SOBRE ESTE LIBRO:</b><br />
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<div style="text-align: justify;">
David Foster Wallace, en una entrevista con Laura Miller para la revista <i>Salon</i>, dijo que una de las cosas mágicas que tenía la narrativa era romper la soledad de nuestras mentes: “<b>Yo no sé qué estás pensando ni qué hay en tu interior y tú no sabes qué hay dentro de mí. Creo que en narrativa podemos salvar en cierto modo ese muro</b>”.</div>
<div style="text-align: justify;">
<i><b>Unicornios y cocodrilos</b></i>, del escritor arequipeño Orlando Mazeyra Guillén, <b>consigue eliminar esa barrera entre el autor y el lector con un estilo mesurado pero potente, que estalla con la sencillez de lo cotidiano.</b></div>
<div style="text-align: justify;">
[…] Los 28 relatos cortos de Mazeyra <b>golpean, por lo general, en los diálogos</b>. Hay un cambio de sentido, una transformación en los personajes y en la esencia del cuento cuando los personajes hablan, y ahí el narrador, por lo general, toma la actitud de entrevistador: entra en lugares desconocidos de su interlocutor, así eso signifique toparse con tierra firme o movediza, placer o dolor.</div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Bryan Paredes </b>(<i>Correo</i>)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
[…] los mejores cuentos del libro son aquellos enfocados en los vínculos familiares: <b>en ese espacio brotan con naturalidad los rencores, los traumas no resueltos, los silencios y las sombras incómodas. En más de uno se atraviesa, además, la figura paterna como símbolo de la amenaza y la memoria borrada o alterada por el alzhéimer</b>. Obsesiones que Mazeyra expurga sin tapujos y que le dan sentido a su literatura.</div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Juan Carlos Fangacio</b> (<i>El Comercio</i>)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En los relatos de Unicornios y cocodrilos —dos de los cuales son más bien evocaciones o testimonios— arde el fuego de la literatura, una pasión por la historia a contar y por la cual su autor —intuyo— se inmola a lo bonzo y toma como insumo sus propios demonios. […] Sin mayores artificios estilísticos y, c<b>on un lenguaje que fluye y corre como pólvora, las historias de Mazeyra son pequeñas bombas que el lector enfrentará para a su vez interpelarse a sí mismo. La brevedad es un punto a favor, pues estos relatos son como inyecciones que van directamente a la vena. Si bien la familia es una constante en muchos de estos cuentos, aparece también un leit motiv subyacente: la literatura o, más precisamente, la escritura. Este juego metaliterario, donde el narrador hace guiños al lector y se vislumbra al autor, es el gran tema unificador en esta nueva entrega. Una virtud del autor es la elaboración de diálogos ágiles y que aumentan la intensidad narrativa</b>. Cuentos como el simbólico «El vuelo del cóndor» o «Un extraño te abraza» —para mi gusto el mejor del libro— revelan una destreza narrativa, pero sobre todo la consolidación en el universo narrativo donde Mazeyra parece más a sus anchas: la familia. […] Otro aspecto a resaltar es el del humor negro que imprime de manera sutil o de manera manifiesta, restando solemnidad a los textos y dándoles un aire más coloquial. </div>
<div style="text-align: justify;">
Por esa cuestión elitista y argollera que tiene la literatura limeña —que no peruana—, Orlando Mazeyra Guillén no tiene el reconocimiento que se merece plenamente. Sea a través de sus cuentos o en sus articuentos en el semanario <i><b>Hildebrandt en sus trece</b></i>, el lector encontrará historias cotidianas, pero contadas con mucho nervio y, sobre todo, que ponen el dedo en la llaga. Esto puede resultar gratificante para quienes buscamos historias que nos conmocionen y no sean mero entretenimiento. </div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Jaime Cabrera Junco</b> (Director de <i><b>Lee por gusto</b></i>)</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cuando Mazeyra sacude la polaroid de su vida van cayendo historias y la colorida y bien definida imagen de sus recuerdos se va opacando y deformando hasta teñirse completamente de negro. Mazeyra pertenece a un grupo particular de escritores que saben (no lo intuyen o lo temen, saben) que, en cualquier momento, algo muy malo les ocurrirá. Mazeyra despertará un día sobre su cama y estirará el brazo en busca de Micaela pero su lado estará frío, se dará cuenta de que hace rato no está ahí, sin recordar que hace décadas no la ve, que nunca se casó con ella, que la soledad es ahora de los recuerdos también. Olvidará, por eso lo escribe todo, para dar fe de haber estado acá: en la tierra de Arequipa, en la hinchada melgariana, en el cementerio con amigos, en el chongo con Eloy, en el corazón de una mujer. Sacude la polaroid con la absurda esperanza de que todo se aclare. Pero nada se aclara.</div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Javier Rivera Martínez</b></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-30760712994186663292020-04-14T22:34:00.001-07:002020-04-14T22:34:10.139-07:00El vuelo del cóndor<iframe allowfullscreen="" frameborder="0" height="270" src="https://www.youtube.com/embed/er3tK6ncjYI" width="480"></iframe><br /><br />
<br /><br />
<div class="y_-47cbzcu7 _5eit j_-47cc391o clearfix" style="background-color: white; color: #1c1e21; font-family: Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin-bottom: -1px; zoom: 1;"><div class="clearfix t_-47cbzemm" style="font-family: inherit; margin-bottom: -6px; zoom: 1;"><div class="clearfix _42ef" style="font-family: inherit; overflow: hidden; zoom: 1;"><div class="i_-47cbzemp" style="font-family: inherit; padding-bottom: 6px;"><div style="font-family: inherit;"><div class="_6a _5u5j" style="display: inline-block; font-family: inherit; width: 428px;"><div class="_6a _5u5j _6b" style="display: inline-block; font-family: inherit; vertical-align: middle; width: 428px;"><div class="_5pcp _5lel _2jyu _232_" data-testid="story-subtitle" id="feed_subtitle_177184868233;10158311816038234;;9" style="color: #616770; font-family: inherit; position: relative;"><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit;"> </span></div><a aria-label="Público" class="uiStreamPrivacy inlineBlock fbStreamPrivacy fbPrivacyAudienceIndicator _5pcq" data-hover="tooltip" data-tooltip-content="Público" href="https://www.facebook.com/BibliotecaNacionalPeru/?__tn__=kCH-R&eid=ARAtdcHQAt4itZ2Kz2V_VUngFfqdx7mr0ewlFt2Rc8qmxjVl1HxkPegPnJYENoBx1n0HvDtqnJREPIbt&hc_ref=ART3czKHmTlMMGT6eGNfmVsH_y52qb5V8nu-o8hpWB1y1WKwnBuYHlqKKTgJJYy80hU&fref=nf&__xts__[0]=68.ARDJRqMTZppomJx96jahmQwDNOodjdes5ExKto1dzAksyRb-J2KBwEOoXESPwZAbm2euIL6GhdEjiAapaQ0O7GaiMhqX7MuELxlIunilFl0ChffaUDOW4Tfj0We01MPwkh1QPNPiHaoTOrvkpYTZYn9E5qpVFrHPYPsK1Qe52vWI26mByqlw6HhE4yQkt-BvbVWzTpInNms6ARigJe7e0m90GO7hK6j6tIWGcBu34Yasw2OIF7CKxI8YdIcaANuRy6zdIv_a3aek7kwtdheWd8xaULZp1H4iH6_wzI-D6xORMdccwPs8bOSn_mcvOpBq28jBvSU3kA-a8sCFJg#" role="img" style="color: #616770; cursor: pointer; display: inline-block; font-family: inherit; text-decoration-line: none; vertical-align: middle; zoom: 1;"><i class="lock img sp_Ke6ZUJH-N4S sx_0b6b25" style="background-image: url("/rsrc.php/v3/yJ/r/DmtZWLqoTvz.png"); background-position: -26px -266px; background-repeat: no-repeat; background-size: auto; bottom: -1px; display: inline-block; height: 12px; margin-bottom: -5px; position: relative; vertical-align: top; width: 12px;"><div style="text-align: justify;"></div></i></a></div></div></div></div></div></div></div></div><div class="_5pbx userContent _3576" data-ft="{"tn":"K"}" data-testid="post_message" id="js_1ey" style="background-color: white; color: #1c1e21; font-family: Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 14px; line-height: 1.38; margin-top: 6px;"><div style="text-align: justify;"><span class="_5mfr" style="font-family: inherit; margin: 0px 1px;"><span class="_6qdm" style="background-image: url("https://static.xx.fbcdn.net/images/emoji.php/v9/t49/1/16/1f4da.png"); background-repeat: no-repeat; background-size: contain; color: transparent; display: inline-block; font-family: inherit; font-size: 16px; height: 16px; text-shadow: none; vertical-align: text-bottom; width: 16px;">📚</span></span><span style="font-family: inherit;"> </span><a class="_58cn" data-ft="{"type":104,"tn":"*N"}" href="https://www.facebook.com/hashtag/vocesqueunen?source=feed_text&epa=HASHTAG&__xts__%5B0%5D=68.ARCm3-8VzlnYHzG_yxVxqpbbC8a5qpNVF89p2cHWUoVGg2KDjcFSffxUAPl0i6YO8Y65TrpK-uxVyi997fs3jGCu8YWVhUULGcCVMkWFoyuxclQbb_ipqR5dzs6kQwEvgRUpArZHDCoUk13AxxdvchatrzzcIYCr-zXO8nbVcXWyOwNPad-pArfSQ_dKYbeEI0S4N21YpuIdjeGgO9cvZDNOSzgLWXoDBbq7ZJAIxewz-mbIt-Jnwd6ejW1nJg-rZKS4pWAXlHLYn6s6pfs4XLUm16cGZENSFnvfI-qrMSn4kP7Tw6s6OVNt-F-1HbhdDz-SVnlFXLrkE06kzfHq&__tn__=%2ANK-R" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;"><span class="_5afx" style="direction: ltr; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;"><span aria-label="hashtag" class="_58cl _5afz" style="color: #365899; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;">#</span><span class="_58cm" style="font-family: inherit;">VocesQueUnen</span></span></a><span style="font-family: inherit;"> </span><span style="font-family: inherit;">es una iniciativa desarrollada por la Biblioteca Nacional del Perú para unir a los peruanos a través de la lectura, todos los días de la cuarentena. En esta ocasión, el escritor arequipeño Orlando Mazeyra nos lee fragmentos de su último libro "Unicornios y cocodrilos", que reúne 28 cuentos para abordar temas como la familia, el dolor o lo prohibido. Estos relatos breves y de lenguaje coloquial, también profundizan en la complejidad de las relaciones humanas.</span></div><div style="display: inline; font-family: inherit;"></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit;">Mira el video:</span><span style="font-family: inherit;"> </span><span class="_5mfr" style="font-family: inherit; margin: 0px 1px;"><span class="_6qdm" style="background-image: url("https://static.xx.fbcdn.net/images/emoji.php/v9/t51/1/16/1f449.png"); background-repeat: no-repeat; background-size: contain; color: transparent; display: inline-block; font-family: inherit; font-size: 16px; height: 16px; text-shadow: none; vertical-align: text-bottom; width: 16px;">👉</span></span><span style="font-family: inherit;"> </span><a data-ft="{"tn":"-U"}" data-lynx-mode="async" href="https://l.facebook.com/l.php?u=https%3A%2F%2Fyoutu.be%2Fer3tK6ncjYI%3Ffbclid%3DIwAR2tk8exUDQozVBLjc9alsIhG9pVEeN6QTEJ_OKCCOtAU1OSqLNGy-tk-zM&h=AT31i32OOAFElxKa8kALLYyxHY73b8LMwY7pIP5ur8h58xdXmBKGgLAAvHHUAEUuwquwXR11IXPClu3V7fwqcedC3ZH7uh_HRCc3ja104R68bkV4k77fp4yOY0OkthHR2F6yH61BmEWonbwAUuwMh0B9ry4sGQ0sZFLjT2C4j2fmi_x0sdVO0i7Cy9srp9eBt_RRIqN146bvPp5QtJy9o9uKLJQdmG-JwlXf31SLISQK3YTkhlri7IiD00RnREBu62OzUEqN1oDil_HuvXDhuuUDbqSSDYoziCxM52f4_bU7aEWJmbqfPqCWQN1jAn6fdf0iK16kzqlDKsx_dIBbD-u6dFnMNb4yc_xTqQ_QVJF9cVoaMkHIXLtm7kZR_0YiAJyJqY_PselPO6HH616eAIDlHJPSZplaPwxGUGzxVNXEDXlxEhTjTJHvI99YD11LM886maLv4Cq-rAJlOTb2JGv36O4nMQMhitDf-lQBxx95A6a8QGlw21CeuEC3OpPUV2418qdahZ1NK1IDJuQ_kPEW3_rk46kEsF55MBpe2cvxQdD46bqt13Ftffi_BUt7tQZJygTrsm6-hKE2TLnsZ4NETRvNE2cEh9rFN_2HKfZ1jn7Gqf-GxzRi" rel="noopener nofollow" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;" target="_blank">https://youtu.be/er3tK6ncjYI</a></div><div style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-align: justify; text-decoration-line: none;"><a class="_58cn" data-ft="{"type":104,"tn":"*N"}" href="https://www.facebook.com/hashtag/labibliotecadetodos?source=feed_text&epa=HASHTAG&__xts__%5B0%5D=68.ARCm3-8VzlnYHzG_yxVxqpbbC8a5qpNVF89p2cHWUoVGg2KDjcFSffxUAPl0i6YO8Y65TrpK-uxVyi997fs3jGCu8YWVhUULGcCVMkWFoyuxclQbb_ipqR5dzs6kQwEvgRUpArZHDCoUk13AxxdvchatrzzcIYCr-zXO8nbVcXWyOwNPad-pArfSQ_dKYbeEI0S4N21YpuIdjeGgO9cvZDNOSzgLWXoDBbq7ZJAIxewz-mbIt-Jnwd6ejW1nJg-rZKS4pWAXlHLYn6s6pfs4XLUm16cGZENSFnvfI-qrMSn4kP7Tw6s6OVNt-F-1HbhdDz-SVnlFXLrkE06kzfHq&__tn__=%2ANK-R" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;"><span class="_5afx" style="direction: ltr; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;"><span aria-label="hashtag" class="_58cl _5afz" style="color: #365899; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;">#</span><span class="_58cm" style="font-family: inherit; text-decoration-line: underline;">LaBibliotecaDeTodos</span></span></a></div><div style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-align: justify; text-decoration-line: none;"><a class="_58cn" data-ft="{"type":104,"tn":"*N"}" href="https://www.facebook.com/hashtag/yomequedoencasa?source=feed_text&epa=HASHTAG&__xts__%5B0%5D=68.ARCm3-8VzlnYHzG_yxVxqpbbC8a5qpNVF89p2cHWUoVGg2KDjcFSffxUAPl0i6YO8Y65TrpK-uxVyi997fs3jGCu8YWVhUULGcCVMkWFoyuxclQbb_ipqR5dzs6kQwEvgRUpArZHDCoUk13AxxdvchatrzzcIYCr-zXO8nbVcXWyOwNPad-pArfSQ_dKYbeEI0S4N21YpuIdjeGgO9cvZDNOSzgLWXoDBbq7ZJAIxewz-mbIt-Jnwd6ejW1nJg-rZKS4pWAXlHLYn6s6pfs4XLUm16cGZENSFnvfI-qrMSn4kP7Tw6s6OVNt-F-1HbhdDz-SVnlFXLrkE06kzfHq&__tn__=%2ANK-R" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;"></a><a class="_58cn" data-ft="{"type":104,"tn":"*N"}" href="https://www.facebook.com/hashtag/yomequedoencasa?source=feed_text&epa=HASHTAG&__xts__%5B0%5D=68.ARCm3-8VzlnYHzG_yxVxqpbbC8a5qpNVF89p2cHWUoVGg2KDjcFSffxUAPl0i6YO8Y65TrpK-uxVyi997fs3jGCu8YWVhUULGcCVMkWFoyuxclQbb_ipqR5dzs6kQwEvgRUpArZHDCoUk13AxxdvchatrzzcIYCr-zXO8nbVcXWyOwNPad-pArfSQ_dKYbeEI0S4N21YpuIdjeGgO9cvZDNOSzgLWXoDBbq7ZJAIxewz-mbIt-Jnwd6ejW1nJg-rZKS4pWAXlHLYn6s6pfs4XLUm16cGZENSFnvfI-qrMSn4kP7Tw6s6OVNt-F-1HbhdDz-SVnlFXLrkE06kzfHq&__tn__=%2ANK-R" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;"><span class="_5afx" style="direction: ltr; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;"><span aria-label="hashtag" class="_58cl _5afz" style="color: #365899; font-family: inherit; unicode-bidi: isolate;">#</span><span class="_58cm" style="font-family: inherit;">YoMeQuedoEnCasa</span></span></a></div></div><div class="_3x-2" data-ft="{"tn":"H"}" style="background-color: white; color: #1c1e21; font-family: Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px;"><div data-ft="{"tn":"H"}" style="font-family: inherit;"><div class="mtm" style="font-family: inherit; margin-top: 10px;"><div class="_6m2 _1zpr clearfix _dcs _4_w4 _41u- _59ap _2bf7 _64lx _3eqz _20pq _3eqw _2rk1 _359m _3n1j _5qqr" data-ft="{"tn":"H"}" id="u_23_d" style="background-color: #f2f3f5; border-radius: 0px; border: none; box-shadow: none; font-family: inherit; margin-left: -12px; margin-right: -12px; max-width: none; overflow: hidden; position: relative; z-index: 0; zoom: 1;"><div class="clearfix _2r3x" style="font-family: inherit; zoom: 1;"><div class="lfloat _ohe" style="float: left; font-family: inherit; width: 500px;"><span class="_3m6-" style="font-family: inherit;"><div class="_63yw" style="font-family: inherit; position: relative;"><div class="_6ks" style="font-family: inherit; line-height: 0; position: relative; z-index: 1;"><a aria-describedby="u_23_r" aria-label="#VocesQueUnen Cap. 18 Orlando Mazeyra" data-lynx-mode="async" href="https://l.facebook.com/l.php?u=https%3A%2F%2Fyoutu.be%2Fer3tK6ncjYI%3Ffbclid%3DIwAR2E26qgQVtLxzNWcpVBp54S4u05tAnwVN83ZbfLXPmduZbfkmNk4GtSEqk&h=AT1houf8IlgYrmyNh_YlxoV__tanAgnZbdK2xbolzbauAlOQkdmgWKtWB6eAXLprkIr-ZtyyHPx6YLZeKqo5Qia7v7eA25qS6YCQdwRvK4-eD9zyOnX6QRXF1UQyUjzgmTGOZ0K_LmX93TAQZcnU9ZZ-uj1e2V6vvf4ogAvmeIPtl9OBk2ce1pU41Lnz3UQ3NZkWNcKcBAKtIKJzX3Aa1FViR_ywxeypfOCGo8UcZRKlf7yi2N0lzUGYPFof-byPtTNg76sKGIkI0UlBhXXofa5xurGeumzbJxXAKaDEeMnBCMe-5uXyJR4n3dfW4ONgIX0x7DoPizur3qfjYpSnmeDPMjCIjXSmHj_-qadtv0CYJCn6MDGMIQJ8o6oFeS9pyMDiIG7DruBg9VOElBP1H-9n0cODvi8b6fp18JZi1IFrYwffbLbs9j7b-LFj9dXakLL0VzONC1bh85at0u73dqi5J2MmSXaN4mFAWgC6MsdSWrVwplgKX4IdBBTeN1aCTaEq4uUU_3JIZJVEJxEFK7hSqNng51qqITZv_3UQP8YFyo6S97vfFS5JuceHXAWNcWAkKzOAY6w3ALNJmyQGInd1cCxv2H4SMdI0bjN5H45k2nYP" rel="noopener nofollow" style="color: #385898; cursor: pointer; font-family: inherit; text-decoration-line: none;" tabindex="-1" target="_blank"><div class="accessible_elem inlineBlock" id="u_23_r" style="clip: rect(1px, 1px, 1px, 1px); display: inline-block; font-family: inherit; height: 1px; overflow: hidden; position: absolute; text-align: justify; white-space: nowrap; width: 1px; zoom: 1;">#VocesQueUnen es una iniciativa desarrollada por la Biblioteca Nacional del Perú para unir a los peruanos a través de la lectura, todos los días de la cuare</div></a></div></div></span></div></div></div></div></div></div>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-53160107380685564472019-11-27T04:33:00.001-08:002019-11-27T04:33:37.295-08:00La ruta literaria de Silábika: Entrevista a Orlando Mazeyra Guillén<iframe allowfullscreen="" frameborder="0" height="270" src="https://www.youtube.com/embed/BXvl7eOY1vc" width="480"></iframe>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-22932157468792869492019-08-04T07:46:00.000-07:002019-08-04T07:46:04.013-07:00Mario Benedetti: cien años<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg44SbJ8Gi4lOrhcchkpYBe4_OlXC32OzSHBFGyN-QICmnEZacNiPX4eM9two1Tiu6_62oEaVVj288JdJp1vQ-Yo0dguJ-p7QEdXouxD-r865rh2QPK1s5w5nwK7MAYl9m4dyIdGg/s1600/VargasLlosa-Benedetti.webp" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="406" data-original-width="722" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg44SbJ8Gi4lOrhcchkpYBe4_OlXC32OzSHBFGyN-QICmnEZacNiPX4eM9two1Tiu6_62oEaVVj288JdJp1vQ-Yo0dguJ-p7QEdXouxD-r865rh2QPK1s5w5nwK7MAYl9m4dyIdGg/s400/VargasLlosa-Benedetti.webp" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Marios: Benedetti y Vargas Llosa</td></tr>
</tbody></table>
<div style="text-align: right;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><i><b>Escribe Mario Vargas Llosa</b></i></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Aunque fuimos buenos amigos, no recuerdo cuándo conocí a Mario Benedetti. Probablemente, la primera vez que fui al Uruguay, en 1966: un viaje maravilloso en el que descubrí que un país de América Latina podía ser tan civilizado, democrático y moderno como Suiza o Suecia. En las calles de Montevideo había carteles anunciando un Congreso del Partido Comunista y los periódicos <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">—El País, La</span> <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Mañana</span>, <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Marcha—</span>estaban muy bien escritos y mejor diagramados, el teatro era soberbio, las librerías formidables, se respiraba por doquier una libertad sin orejeras. Ese país tan chiquitito tenía una vida cultural de primer orden y, si uno podía pagarlas, en Linardi y Risso encontraba todas las primeras ediciones de Borges. Yo había dado antes conferencias ante pequeños públicos, pero en la Universidad de Montevideo, adonde me llevó José Pedro Díaz, hablé de literatura ante un público que abarrotaba el auditorio, algo que me dejó pasmado.</span></span></div>
<div dir="ltr">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Si fue entonces donde nos conocimos, <b>debí felicitarlo por sus cuentos y poemas, que había leído en Lima y me habían entusiasmado, <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Montevideanos</span> <wbr></wbr>sobre todo, pero también la poesía de <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Poemas de la oficina</span> y <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Poemas del</span> <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">hoyporhoy.</span> Era un escritor que rehuía los “grandes temas” y se acercaba a la gente común y corriente con delicadeza y ternura, a los oficinistas, los taquígrafos, los empleados del montón, las familias sin historia, aquella clase media que sólo en el Uruguay parecía representar a todo un país en la América Latina de aquellos días, de desigualdades atroces. Benedetti lo hacía con una prosa y unos versos sencillos, claros, directos, impecables. Era una voz nueva y sorprendente, sobre todo en la literatura de la época, porque rehuía el relumbrón y el aspaviento y transmitía sinceridad y limpieza moral</b>.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Nos vimos luego muchas veces en lugares diferentes e intercambiamos una copiosa correspondencia. Alguna vez, jugando a adivinar qué escritores latinoamericanos entrarían en el cielo, si existía, recuerdo un empate entre dos candidatos: Rulfo y Benedetti. Eso fue antes del <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">caso Padilla,</span> un cataclismo del que ahora nadie se acuerda y que a comienzos de los años setenta rompió relaciones y dividió ideológicamente a unos escritores del nuevo mundo que, hasta entonces, pese a la diversidad de opiniones, manteníamos el diálogo y hasta la amistad. Como él y yo adoptamos posturas radicalmente opuestas sobre este asunto, desde entonces nos vimos poco y los breves encuentros a lo largo de los años fueron casi siempre formales, desprovistos de la complicidad y el afecto de antaño.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero yo lo seguí siempre leyendo y admirando, sobre todo cuando escribía cuentos, novelas, poesía y ensayos que no fueran políticos. Y debo haber sido uno de los pocos lectores que defendió como un logro muy audaz <span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; font-variant-caps: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">El cumpleaños de Juan</span><span style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-stretch: inherit; font-style: italic; font-variant-caps: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Ángel,</span> una novela escrita en versos, experimento que la crítica, en general, recibió con escepticismo. Tuvimos una polémica bastante enérgica, en el diario EL PAÍS, y algunos años más tarde, creo que la última vez que nos encontramos, él la recordó con nostalgia, contándome que algunos lectores del diario habían escrito pidiendo que continuáramos polemizando porque lo hacíamos con buenos argumentos y, sobre todo, sin insultos.</span></span></div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me he preguntado mucho, estos últimos años, qué hubiera pensado Benedetti con las ocurrencias políticas de los últimos tiempos. Sobre todo, de la caída y, para todos los efectos prácticos, desaparición del comunismo. ¿Alguien puede todavía pensar que Cuba, Venezuela o Corea del Norte podrían ser los modelos para acabar con el subdesarrollo y crear una sociedad más justa y próspera? O de la lenta pero inequívoca resignación de la izquierda extrema en América Latina a las elecciones libres y a la coexistencia en la diversidad que antes rechazaba como al agua los gatos. Nadie puede contestar estas preguntas en su nombre, ahora que él está ausente, por supuesto. Emir Rodríguez Monegal, que había sido su amigo y del que se distanció también por razones políticas, decía de Mario Benedetti que su formación en el Colegio Alemán de Montevideo lo convirtió en un “puritano” de ideas rígidas, que, una vez tomada una posición, era incapaz de dar su brazo a torcer. Yo lo refutaba, convencido de que, aunque se equivocara en muchas cosas, como todo el mundo, lo hizo siempre con buena fe y por razones generosas.</span></span></div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><b>Ahora nos quedan, por encima de sus posturas políticas, los bellos poemas y relatos que escribió, reivindicando con amor esas vidas incrustadas en la monotonía de la rutina, sin grandeza, de heroísmo discreto, que van puntualmente a la oficina y ahorran parte del salario haciendo sacrificios para disfrutar de unas pequeñas vacaciones, que lo piensan varias veces antes de comprarse un nuevo vestido o traje, y que viven siempre con apuros, aquellos ciudadanos sin historia que suelen ser los grandes excluidos de la literatura, a los que él dio vida, color, resaltando su decencia y mostrando que ellos son los verdaderos pilares de una sociedad, pues de ellos depende que ésta prospere o retroceda, que se modernice o retorne al salvajismo de la tribu.</b></span></span></div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El mundo que Benedetti construyó no hubiera sido posible sin la experiencia uruguaya que lo marcó con fuego, aunque, ya hombre grande, viviera en el exilio muchos años. Pero, no hay duda, se llevó consigo cuando fue ciudadano del mundo, la memoria de su pequeño país, la excepción a la regla en América Latina por sus instituciones representativas, su amor a la libertad y a la cultura, y por haber representado durante tantos años la civilización en un continente que parecía haber elegido la barbarie. Su gran mérito fue haber mostrado que esa sociedad que se acercaba a la perfección, no era nada perfecta cuando se la exploraba de cerca con el cariño que a él le inspiraban esas gentes que sin saberlo ni proponérselo construyen un país mediante sus esfuerzos cotidianos. Cuando los jóvenes revolucionarios llamados tupamaros decidieron que allí también hacía falta una revolución a la cubana —el sueño ideológico de la época— e introdujeron la violencia, aquel país tolerante desapareció y se convirtió en otro país latinoamericano prototípico, con militares torturadores y revolucionarios terroristas. Uruguay pareció tocar fondo. Menos mal que se ha ido reconstruyendo y vuelve, poco a poco, a parecerse al de los poemas y narraciones de los grandes escritores uruguayos de aquella notable generación: Juan Carlos Onetti, Idea Vilariño, Ángel Rama, Emir Rodríguez Monegal, Carlos Real de Azúa, Mario Benedetti y tantos otros.</span></span></div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La última vez que nos vimos fue en Buenos Aires. Estaba cenando con unos amigos en una pequeña fonda en la que preparan buenos bifes y alguien me avisó que allí estaba también Benedetti. Fui a saludarlo y lo encontré cansado y envejecido. Cambiamos unos recuerdos afectuosos y, a la hora de despedirnos, estoy seguro que, en vez de la mano, nos dimos un abrazo.</span></span></div>
<div style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #222222; font-stretch: inherit; line-height: inherit; margin-bottom: 2.188rem; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Fuente: diario <i><b>El País</b></i> de Madrid.</span></span></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: rgba(255, 255, 255, 0);"><br /></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-78629762565666517982019-07-10T07:00:00.001-07:002019-08-19T20:44:46.565-07:00Sobre Tía María<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="background-color: white; color: #1c1e21;">"Pensar el hoy significa, ante todo, recobrar la mirada crítica. Por ejemplo, el triunfo de la economía de mercado – un triunfo por default del adversario – no puede ser únicamente motivo de regocijo. El mercado es un mecanismo eficaz pero, como todos los mecanismos, no tiene conciencia y tampoco misericordia. Hay que encontrar la manera de insertarlo en la sociedad para que sea la expresión del pacto social y un instrumento de justicia y equidad. Las sociedades democráticas </span><span class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1c1e21; display: inline;">desarrolladas han alcanzado una prosperidad envidiable; asimismo, son islas de abundancia en el océano de la miseria universal. El tema del mercado tiene una relación muy estrecha con el deterioro del medio ambiente. La contaminación no sólo infesta al aire, a los ríos y a los bosques sino a las almas. Una sociedad poseída por el frenesí de producir más para consumir más tiende a convertir las ideas, los sentimientos, el arte, el amor, la amistad y las personas mismas en objetos de consumo. Todo se vuelve cosa que se compra, se usa y se tira al basurero. Ninguna sociedad había producido tantos desechos como la nuestra. Desechos materiales y morales". (<b>Octavio Paz</b>)</span></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-85779430297426507512019-06-21T07:25:00.000-07:002019-06-21T07:39:09.578-07:00Independiente, mi viejo y yo<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiOSbkcQWlRA0LsevMmVDZVlhyCOK7wksRIjQjMaxfJfnZMO-_mnYWZscmIa5rXQ8FCBOLVL_ETPON-XG-964Cd1qvIb2z3fcoyzJTsC0ZHOmjaZ5GsyKCVNBmY0kM3t4pcWruvg/s1600/bochini.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="540" data-original-width="960" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiOSbkcQWlRA0LsevMmVDZVlhyCOK7wksRIjQjMaxfJfnZMO-_mnYWZscmIa5rXQ8FCBOLVL_ETPON-XG-964Cd1qvIb2z3fcoyzJTsC0ZHOmjaZ5GsyKCVNBmY0kM3t4pcWruvg/s400/bochini.jpg" width="400" /></a></div>
<blockquote class="tr_bq">
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">[…] Después me levantó en brazos y cantamos “la copa, la
copa, se mira y no se toca”, y dimos la vuelta olímpica a los saltos, por toda
la casa. Vino el micro y me fui al jardín de infantes.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Supongo
que ésos son los recuerdos que se le meten a uno en los recovecos del corazón,
y echan cría y se nutren de su propio néctar, y nos marcan para toda la vida. Por
lo menos así ocurrió conmigo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y no me avergüenza
reconocer que ahora, ya de grande, cuando tengo un problema que me agobia, o
cuando me toca sufrir por radio y por televisión un partido de Independiente y me
como los codos por la ansiedad y la angustia (la vida me enseñó lo
inconveniente que puede resultar fumarse los nervios), siento un impulso
difícil de dominar, una tentación casi irresistible que me invita a irme a
dormir, a abrigarme a la certeza de que mientras yo sueño, mi papá e
Independiente, como duendes laboriosos, van a arreglarme el mundo para que yo
lo encuentre refulgente en la mañana.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Y queda
en mí el mandato inexorable que dictan las fidelidades eternas. Cuando
Independiente gana un campeonato –al fin y al cabo, Dios y sus milagros
evidentemente existen– lo primero que hago, en la cancha o en mi casa, es
levantar los brazos y los ojos hacia el cielo, abrazándolo a mi viejo a través
de todos los rigores del destino, y por encima de todas las traiciones de la
muerte. Lo que pasa es que tratándose del Rojo, de mi viejo y de mí, hay veces
que la muerte es una señora que nos tiene un miedo bárbaro. Una vieja podrida a la
que, de locales en Avellaneda, le tiramos la camiseta y podemos, de vez en
cuando, llenarle la canasta.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Todavía
me acuerdo de ese número once de cuero blanco, cosido en la camiseta como el de
Bertoni. Pero ahora también veo, cuando me fijo con suficiente atención, que mi
viejo también lleva lo suyo. Lo tiene ahí, en la espalda, justo a la altura del
nacimiento de las alas: un diez de cuero blanco, igualito igualito al de
Bochini.</span></div>
</blockquote>
<br />
<div style="text-align: right;">
Eduardo Sacheri, <i><b>La vida que pensamos (cuentos de fútbol) </b></i></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-75771158240800253632019-02-20T07:21:00.000-08:002019-02-20T18:57:02.875-08:00FBC Melgar nos hace soñar... y en Lima tienen pesadillas<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwGX7gOveUMKpaaF_PCs2TJYL3JEtFQ3OueLHfYNfC2_ECg-JxDwUCqTfXB7NHn3zuo7CSDSUGBgsW0_k33DYmfv-DjnBVKkX0KLLf9HyzKfA2Eb_h_iCL1DjpIpwQkUkj3RLNvw/s1600/so%25C3%25B1ar-melgar.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="451" data-original-width="396" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwGX7gOveUMKpaaF_PCs2TJYL3JEtFQ3OueLHfYNfC2_ECg-JxDwUCqTfXB7NHn3zuo7CSDSUGBgsW0_k33DYmfv-DjnBVKkX0KLLf9HyzKfA2Eb_h_iCL1DjpIpwQkUkj3RLNvw/s400/so%25C3%25B1ar-melgar.jpg" width="350" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Portada del diario <i><b>Sin Fronteras</b></i>: arranque extraordinario de Melgar en la Copa Libertadores. Tres partidos con el arco invicto. Dos victorias en Arequipa y un empate en Santiago de Chile. Y vamos por más.</td></tr>
</tbody></table>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAZk0MDDpu4Nt7nuF9lyWp6LHEaDbtkenk_NPmaEWfxP2Izu8x9_WgnqxRlcila8cEQYVj-NBLvngtip3C5y0E0OrXVWU6SQFVHl-ikwN66je50SqBcFZUPHXtHBYsDYJm9rVb3w/s1600/portada-correo-20-febrero.png" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="462" data-original-width="405" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAZk0MDDpu4Nt7nuF9lyWp6LHEaDbtkenk_NPmaEWfxP2Izu8x9_WgnqxRlcila8cEQYVj-NBLvngtip3C5y0E0OrXVWU6SQFVHl-ikwN66je50SqBcFZUPHXtHBYsDYJm9rVb3w/s400/portada-correo-20-febrero.png" width="350" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Portada del diario <i><b>Correo</b></i> (Arequipa): <b>torrencial lluvia activó torrentera de la avenida Venezuela (donde queda el estadio Monumental Arequipa) y dejó daños en distritos de Arequipa</b>.</td></tr>
</tbody></table>
<br />
<br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Aquellos que, a pesar
de ser arequipeños, consumen la prensa deportiva de la capital se creen todos
los dislates y mentiras que (en muchos casos con mala leche) llegan desde allá.
Y –esto es lo peor– se difunden a lo largo y ancho de todo el Perú. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><span style="mso-spacerun: yes;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">En el canal de <b>RPP
Noticias</b>, por ejemplo, desde hace tres semanas <b>siguen diciendo que el argentino
Jorge Pautasso es “uruguayo”</b>, sin importarles que se trata de uno de los
entrenadores más importantes del fútbol peruano (<b>ha sido asistente técnico de
Gerardo Martino en nada más y nada menos que la selección argentina, también en
la paraguaya y en el gigante catalán F.C. Barcelona</b>). <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">En <b>Gol Perú</b> comentaban
ayer con cierto humor –un sentido del humor bastante desafortunado– que en el
<b>partido Melgar-Caracas la hinchada iba a ¡estar dividida!</b> Sí, ¡DIVIDIDA EN
AREQUIPA! Como si alguna vez sus equipos de Lima hubieran conseguido ser
locales en nuestra ciudad (<b>hemos disputado, siempre siendo mayoría en el
estadio de la UNSA, en los últimos cinco años 2 finales con Cristal, una
semifinal con Universitario y otra con Alianza Lima</b>). Aunque, claro, ya sabemos
por quién hincharon muchos limeños… como los “amigos” de Gol Perú…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">En <b>Fox Sports Perú</b> (que
en realidad debería<span style="mso-tab-count: 1;"> </span>llamarse <b><span style="color: red;">Fox
Sports Lima</span></b>) están tan desinformados que dijeron que Hernán Hinostroza
alinearía en Santiago de Chile ante la Universidad de ese país, cuando todos en
Arequipa sabíamos que ni siquiera había subido al avión que los llevó a Chile.
Y, luego de la brillante e histórica clasificación de Melgar en el estadio
Nacional de Santiago, <b><span style="color: red;">siguieron mintiendo cuando afirmaron que el entrenador de
Melgar no quería hablar con la prensa de Arequipa. Pautasso, para enmendarles
la plana, ha hablado con la prensa mistiana luego de la derrota contra
Municipal y también después de la celebrada victoria contra el Caracas</span></b>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Hay que ser muy mala
leche para tergiversar las palabras del entrenador de Melgar como lo hizo
anoche la mesa de Fox Sports Perú. Era obvio que Pautasso se refería a la
proximidad entre el partido entre Municipal y Caracas (y no a los 4 días de
descanso que tuvo entre el partido en Chile y el duelo contra Municipal por la
Liga 1). <b><span style="color: red;">La Federación Peruana no ha apoyado a Melgar a pesar de que, en
palabras del director técnico argentino, Melgar está haciendo una “patriada”
que pos del prestigio del fútbol peruano. </span></b>¿Se entiende o no? Además en <b>Fox
Sports Lima</b> siguen con el discurso de que la hinchada de Melgar es violenta y
se comporta mal, hasta proponen que nos quiten la localía (como ya dijo el
señor Alan Diez con la venia de su colega Loret de Mola). <b>Pero no dicen nada
del mal comportamiento de la barra de Universitario y del uso de bengalas y pirotecnia el domingo pasado en
Moyobamba (¡que están prohibidas!). </b>Claro: se quejan sólo cuando les conviene.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><b>¿Hace cuántos años un
club peruano jugaba tres partidos de Copa Libertadores y dejaba su valla en
blanco (ganado dos partidos en casa y empatando de visita)? ¿Cuándo un club
peruano eliminó a uno chileno en Santiago (en partidos de ida y vuelta) por
Copa Libertadores de América?</b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Sobre el tema
recurrente de que va muy poca gente al estadio Monumental Arequipa. En primer
lugar, vean la escasísima asistencia que tuvo el partido en Chile entre
Palestino y el Deportivo Independiente de Medellín. <b>Ojo: jugaron en el estadio
San Carlos de Apoquindo que apenas es para unos quince mil espectadores y ni
siquiera lo llenaron (el Alberto Gallardo en donde juega Cristal es para 18 mil
y nunca lo llenan, ¿por qué la prensa de Lima no le jala las orejas a la
hinchada de su “campeón”? ¿No se trata de un club “grande”?</b>).<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Otro dato que viene de
un país recontra futbolero como Uruguay: el Defensor Sporting no pudo llenar el
estadio Luis Franzini (de 18 mil espectadores) ante el Barcelona de Ecuador.
Ese pequeño recinto estaba vacío y era ¡copa Libertadores! Lo mismo podríamos
decir de los partidos entre el Delfín de Ecuador y el Caracas. No pongo acá el
ejemplo de clubes argentinos como el Talleres de Córdoba porque ellos, al menos
para mí, tienen a las mejores hinchadas del continente. Y sí, debemos apuntar a
eso, sin embargo no es sencillo <b>porque para empezar la Policía Nacional del Perú no deja que la barra de Melgar ingrese instrumentos y banderolas (cuando la
CONMEBOL sí lo permite). Por otro lado los controles para ingresar al estadio son muy lentos y por eso la imagen de las tribunas al empezar el partido es muy distinta a la que se tiene al finalizar el encuentro.</b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Ayer en Arequipa, horas
antes del duelo entre FBC Melgar y Caracas se cayó el cielo como dice la
portada de hoy del diario <i>Correo</i> (edición Regional). Hay quien dice que para el
hincha no hay pretextos. Lamentablemente en Arequipa cada vez que hay una
lluvia intensa la ciudad colapsa y no estoy exagerando. La lluvia torrencial de
ayer activó la torrentera de la avenida Venezuela (donde queda el estadio
Monumental Arequipa) y dejó severos daños en distintos distritos de
Arequipa.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Y sobre la hinchada del
Caracas nada tengo que decir, salvo que elogiarlos por estar con el equipo de su país. Yo fui a la tribuna oriente que al final estuvo con
mucha gente (reitero: los controles son pésimos y por eso cuando el partido empieza el
estadio está vacío, comparen con las imágenes al final del Melgar-Caracas). </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">En
la tribuna sur también hubo mucha gente que asistió a pesar de las
complicaciones de la lluvia. En la tribuna norte (del visitante) había un racimo
de hermanos venezolanos. <b>No, no llegaron esos miles de hinchas venezolanos que
anunció Gol Perú.</b> Nada de eso. Es más –y quiero cerrar con esta anécdota– cuando
Melgar se puso 2 a 0, los visitantes tuvieron varias chances para descontar y
la pequeña barra venezolana utilizaba esa odiosa frase que también es común en
los peruanos: <b>“¡Sí se puede!”.</b> Me llama mucho la atención porque en el Perú
solemos utilizarla cuando nos sentimos inferiores al rival y necesitamos “creérnosla”
para ganar partidos (o al menos intentar empatarlos). Entonces si seguimos así, de la mano de Pautasso vamos a
seguir creciendo y nos van a respetar cada vez más. Vean este dato que colgó en su Twitter el periodista Mario
Pinedo: <b>Melgar ya igualó en estos 3 partidos de la era Pautasso todo lo hecho
en las últimas cuatro presentaciones de la Copa Libertadores (1984, 2016, 2017,
2018) en veinte (¡20!) partidos. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Ayer Melgar –con lluvia
y con su gente– dio otro paso más en busca de la fase grupos de la Copa
CONMEBOL Libertadores, aunque a muchos (que hincharon por el Caracas) les joda.
Les joderá más cuando llenemos el estadio Monumental Arequipa.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">¡Gracias, Pautasso! ¡Gracias,
equipo!<o:p></o:p></span><br />
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span>
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Nota final.- </span><span style="font-family: "times new roman" , serif;"><b>El entrenador argentino Miguel Ángel Russo se alineó a la postura de Jorge Pautasso e indicó que hay que apoyar a TODOS los clubes que participan en la Copa Libertadores.</b> Algo más: la prensa de Lima ya reconoce (porque no le queda de otra) que se hizo el fixture de la Liga 1 Movistar sin pensar que podía clasificar. Acá una prueba contundente: si Melgar consigue la clasificación en Caracas el martes 26 de febrero entonces forzosamente no podrá jugar contra UTC de Cajamarca en el horario programado por la Liga 1 (domingo 3 de marzo a las 6.15 de la tarde) porque tendría que jugar contra San Lorenzo de Argentina el martes 5 de marzo a las 5.15 de la tarde y NO HAY NI SIQUIERA 48 HORAS entre el partido de Liga y el de Copa Libertadores. Mañana jueves al mediodía la Liga 1 dará una conferencia de prensa... a ver qué nos dicen...</span><br />
<br />
<div>
<br /></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1Y5mipyY61D_hjZkEWe9LROeaSOhGds2-oBtS0aPlxFgAFTMbj5Oz_q7rw1TQQQ5TfqYj58-73ZZ6ciOtfqMSGqUosPN0VxmYGU_mBvDniI1DnnUnD7mDTfHCJoCdWTMiemgcHw/s1600/estadio-unsa-19-febrero.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="960" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1Y5mipyY61D_hjZkEWe9LROeaSOhGds2-oBtS0aPlxFgAFTMbj5Oz_q7rw1TQQQ5TfqYj58-73ZZ6ciOtfqMSGqUosPN0VxmYGU_mBvDniI1DnnUnD7mDTfHCJoCdWTMiemgcHw/s400/estadio-unsa-19-febrero.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fotografía tomada desde la tribuna oriente alta de la tribuna sur anoche en el estadio. Al final sí hubo gente.</td></tr>
</tbody></table>
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></div>
<br />Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-49859807345158633492019-01-03T14:27:00.000-08:002019-01-03T18:57:18.971-08:00Adiós, Hemingway<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgo3-jQQ1oVxkAsZiH9s40xSTlZHCTywE2gRZdk93IX90T3Ts6mRpMq9xQO0sy6O_6O6kY_LWlNWrdsJbvisrELY8Uhm3Bub1BNgxjT5ITPhFnANFSXP11vxrxhYhZ7TmgaNPtd_g/s1600/ADIOS-HEMINGWAY.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1052" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgo3-jQQ1oVxkAsZiH9s40xSTlZHCTywE2gRZdk93IX90T3Ts6mRpMq9xQO0sy6O_6O6kY_LWlNWrdsJbvisrELY8Uhm3Bub1BNgxjT5ITPhFnANFSXP11vxrxhYhZ7TmgaNPtd_g/s400/ADIOS-HEMINGWAY.jpg" width="262" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<blockquote class="tr_bq">
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<b>–Adiós, Jemingüéy –</b>gritó, y recibió como respuesta la sonrisa del hombre.</blockquote>
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<span style="white-space: pre;"> </span>Varios años después, cuando descubrió <b>la dolorosa necesidad de escribir</b> y comenzó a escoger a sus ídolos literarios, Mario Conde supo que aquélla había sido la última navegación de Ernest Hemingway por un pedazo de mar que había amado como pocos lugares en el mundo, y comprendió que el escritor no se podía estar despidiendo de él, un minúsculo insecto posado sobre el malecón de Cojímar, sino que<b> en ese momento le estaba diciendo adiós a varias de las cosas más importantes de su vida. </b> </blockquote>
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
[…]</blockquote>
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
De cualquier modo, a su lado no quería ni a escritores ni a políticos. Y por eso se negaba, cada vez más, a hablar de literatura. Si alguien le preguntaba sobre sus trabajos apenas decía: ‘<i>Estoy trabajando bien</i>’, o si acaso: ‘<i>Hoy escribí cuatrocientas palabras</i>’. Lo demás no tenía sentido, <b>pues sabía que cuánto más lejos va uno cuando escribe, más solo se queda. Y al final uno aprende que es mejor así y que debe defender esa soledad: hablar de literatura es perder el tiempo, y si uno está solo es mucho mejor, porque así es como se debe trabajar, y porque el tiempo para trabajar resulta cada vez más corto, y si uno lo desperdicia siente que ha cometido un pecado para el cual no hay perdón</b>.</blockquote>
<div style="text-align: right;">
<b><i>Adiós, Hemingway</i></b>, Leonardo Padura</div>
</blockquote>
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-47300466021128297862018-11-09T07:24:00.000-08:002018-11-09T07:24:00.823-08:00Mario Vargas Llosa en el Hay Festival Arequipa 2018<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">La cuarta edición del
Hay Festival Arequipa trae de vuelta a casa a Mario Vargas Llosa, el verdadero
culpable de que este evento de primera fila se lleve a cabo anualmente en su
tierra natal a partir del año 2015.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;">Este
retorno —que se ha vuelto recurrente desde que la Biblioteca Regional de la
calle San Francisco lleva su nombre— dista mucho de ser como el de los años
cuarenta del siglo pasado, que él recuerda como una gran aventura: «<b>el viaje a
Arequipa con mi madre, la abuelita y la Mamaé, en 1940, para asistir al
Congreso Eucarístico, en Arequipa, la tierra solar, que se mantenía viva en las
anécdotas innumerables y la nostalgia de la familia. Estuvimos alojados en casa
del tío Eduardo, que era juez, solterón y bondadoso; su cocinera Inocencia
preparaba unos candentes chupes en los que sobresalían unos monstruos crustáceos,
de cáscara rojiza y pinzas articuladas que me fascinaron. Recuerdo aquel viaje
como una exaltante expedición: el tren Cochabamba a la Paz; las calles empinadas
de la capital boliviana; el vaporcito que cruzaba el Titicaca de noche, hasta la
llegada a Puno, en el amanecer. Y, luego, nuevamente, el tren hasta la Ciudad Blanca.
Allí estaban tantas cosas conocidas hasta entonces sólo de oídas: las casas de
sil</b></span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; text-indent: 35.4pt;"><b>lar; el Misti y los volcanes; la casita donde nací, que me mostraron, en el Boulevard Parra, el queso helado y las pastas de La Ibérica. Los rezos y cantos multitudinarios del Congreso Eucarístico me asustaban, y, todavía más, la voz del orador, un hombre importantísimo, de corbata pajarita, que señalaban con el dedo: Víctor Andrés Belaunde. Cuando regresamos a Cochabamba, yo me sentía ya grande</b>».</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; line-height: 17.12px;">Hoy, con 82 años a cuestas y con una vida de novela que ni el propio escriba boliviano Pedro Camacho hubiera imaginado, el Premio Nobel de Literatura arequipeño podría ser descrito como un personaje de su notable ficción “La tía Julia y el escribidor” (para ser preciso como una de las creaturas de los desaforados radioteatros): «<b>Como todo ser elevado por sobre la medianía, era discutido, criticado y verbalmente escarnecido por sus colegas, esos incapaces (a diferencia de él) de producir milagros</b>».</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; line-height: 17.12px;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%;"></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjwgAMkXZ8z8RXBzdLp7G4MF-IoGqGZb9neoIbUBpuAgdiJhqnOXiY7q5R1FR07PA_i6OmTlkgltLRFxyI8lcXR1caBV1wxi8Xi4zzXMks7ierhYmjjNUlyqDRI-uUBTCZan-Itw/s1600/Mario-Vargas-Llosa-2018.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="1200" height="133" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjwgAMkXZ8z8RXBzdLp7G4MF-IoGqGZb9neoIbUBpuAgdiJhqnOXiY7q5R1FR07PA_i6OmTlkgltLRFxyI8lcXR1caBV1wxi8Xi4zzXMks7ierhYmjjNUlyqDRI-uUBTCZan-Itw/s320/Mario-Vargas-Llosa-2018.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-PE; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US;"><br /></span>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-PE; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US;"><span style="color: #cc0000;">(La nota completa aparece hoy en la página 16 del diario <i><b>El Pueblo</b></i> de Arequipa)</span></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-33098111154336763692018-10-29T20:03:00.002-07:002018-10-29T20:03:42.017-07:00Si yo fuera Maradona... (Feliz cumple 58, Diego)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAgA6HAn5UGb6gb6nh-abHHD1sxmrVQHeCcwriBNr84JfLVPu5iMnHB3FrYNav3zpglpRgm3HF-yd4TVRjfuaKiPkse9tAGVZoYBASJ3cAouXDHHGecS3Ozst6u20y4ZotGJFjag/s1600/maradona-58.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="290" data-original-width="215" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAgA6HAn5UGb6gb6nh-abHHD1sxmrVQHeCcwriBNr84JfLVPu5iMnHB3FrYNav3zpglpRgm3HF-yd4TVRjfuaKiPkse9tAGVZoYBASJ3cAouXDHHGecS3Ozst6u20y4ZotGJFjag/s1600/maradona-58.jpg" /></a></div>
<br />
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 14px;">Hace algunos días le preguntaban a Maradona sobre su cumpleaños y el Diego, ahora en su faceta de entrenador en la segunda división mexicana, respondía: <b>"Ayer tenía 20 años y el martes cumplo 58. Los he vivido bien y a veces los he vivido mal".</b> En la parte final de “Maradona by Kusturica”, el documental que el cineasta serbio Emir Kusturica le dedica al más grande, éste afirma: <b>"Me podrán decir que estoy bien o que estoy mejor… o que estoy mejor que antes, pero nadie está adentro mío: yo sé las culpas que tengo y no las puedo remediar"</b>. </span></blockquote>
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: "helvetica" , "arial" , sans-serif; font-size: 14px;">¿Qué decir del que, para mí, es y será el futbolista más emblemático de este deporte? Ojalá pudieras volver a vestirte de corto, Pelusa, y explicarles a todos de qué se trata el fútbol. ¿Sólo un juego? Nunca. Te he admirado más en tus fracasos y tristezas que en tus éxitos pletóricos: ¡arranca desde la media cancha y, pase lo que pase, no te detengas jamás!</span></blockquote>
<br />
<iframe allow="autoplay; encrypted-media" allowfullscreen="" frameborder="0" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/HjLsfP8qDxo" width="560"></iframe>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-23310587267725556412018-09-25T13:41:00.001-07:002018-09-25T13:55:23.885-07:00"De niños eran perfectos": una lectura del libro de Orlando Mazeyra Guillén<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg7oBumkQvb9VzQhRZg9k5egMMoZ5Am-F9Yp_ilUgXO_XLfZf5dHoAUB5WjfBGa9PAXiPQaTIo303Haj0VjgvA3b50yL_PZ5yapUDK05jQJPzWuzFNqXG8P5ORiU3UROfwjVyYcQ/s1600/la-talega.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><img border="0" data-original-height="664" data-original-width="187" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg7oBumkQvb9VzQhRZg9k5egMMoZ5Am-F9Yp_ilUgXO_XLfZf5dHoAUB5WjfBGa9PAXiPQaTIo303Haj0VjgvA3b50yL_PZ5yapUDK05jQJPzWuzFNqXG8P5ORiU3UROfwjVyYcQ/s400/la-talega.png" width="112" /></span></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">No hace mucho
fuimos compañeros de clases. La maestría que realizamos fue por diferentes
motivos. La decepción compartida. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Nuestra única
escapatoria eran esas tardes en La Ramadita, local predilecto de fines de
semana. Conversaciones de todo tipo, sobre nuestras vidas, añoranzas, pero
sobre todo de literatura, música y películas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Este libro
empieza con una cita de Ernesto Sábato: <b>«Dios
no escribe ficciones: nacen de nuestra imperfección, del defectuoso mundo en el
que nos obligaron a vivir».</b> Y solo puedo recodar esas tardes en que la
literatura era nuestra escapatoria, nuestra forma de sentir y expresarnos. Otro
punto importante en el tema, en esas conversaciones por los sábados, era el que
se refleja con otra fase en el libro, esta vez de Truman Capote: <b>«Al principio fue muy divertido. Dejó de
serlo cuando descubrí lo diferencia entre escribir bien y mal, y luego hice un
descubrimiento más alarmante aún: la diferencia entre escribir bien y el
verdadero arte, una diferencia sutil pero brutal». <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Esas eran nuestras
tardes de fines de semana. No había escapatoria. Éramos víctimas de nuestras
debilidades. Como la mujer en el primer cuento, que descubre o se siente
siempre o casi siempre la más gorda del grupo, del barrio, de la ciudad.
Emprendiendo una lucha equívoca por
tratar de pertenecer al estereotipo frívolo y muchas veces calculado de nuestra sociedad.
Y digo esto último por la descarnada lucha de la publicidad, del marketing por
tratar de vender una imagen falsa de los que somos. La chica en su intento,
como señala el autor por tratar de estilizar su fofo cuerpo, la lleva a la
desilusión, lágrimas y depresiones sin rostro. No podía ser otro final.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Estos relatos que
datan del año 2005, nos muestran a un Orlando Mazeyra con diferentes preguntas
que se vuelcan en su prosa, muchas veces esenciales y sin respuesta a pesar del
tiempo transcurrido y, al contrario, las dudas se ahondan; se vuelven más
complejas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Los amigos del
barrio, la patota, las palomilladas, las decepciones amorosas y de otra índole,
esas primeras experiencias que se intentan olvidar con tragos, pero que nunca
se olvidan, sobre todo cuando te dedicas a la miserable tarea de escribir. Sí,
no todo es malo, pero normalmente vuelves a ese mismo lugar, a ese mismo
recuerdo, te atrincheras y es lo peor que te puede pasar hasta que lo expulsas
en letras negras o el color que prefieras, dibujándose en alguna hoja en
blanco, garabatos sobre garabatos; imágenes de rostros, recuerdos que nos
flagelan por las noches de insomnio, de mensajes repentinas cuando pensabas que
ya todo estaba olvidado, ella escribe sin saber que tú intentabas inútilmente
apartarla, borras los mensajes luego de embriagarte con los amigos, te
envalentonas y dices que ya no sientes nada por ella o eso al menos quieres
creer, ya sabemos que no hay peor mentira. Tus amigos te felicitan por la
acción, luego en la noche, mientras tratas de dormir en tu cuarto y los
recuerdos imperan, te llega un nuevo
mensaje: es ella, no tienes ni idea de lo escribe, y solo te queda preguntarte: ¿y ahora qué
mierda quiere? <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Luego tenemos a
un tipo que no recuerda su nombre y mucho menos haberse enamorado, ni tampoco
haberse casado. ¿Qué afortunado, no?, pensarán algunos. Pero la realidad dentro
de la ficción es otra, el hombre está casado y la mujer sufre. Ella tiene que
repetirle a él que su mal, su falta de memoria, es debido a lagunas mentales, o
como le dijo su médico de cabecera: Alzheimer. Él por supuesto no le cree. Y se
propone la difícil tarea de recordar su nombre. Los días son iguales para
ambos, él despertando sin saber quién es ni quién es la mujer a su lado, y ella
explicándole todo de nuevo. La idea que plantea el autor me parece
extraordinaria. Y juega con eso en el transcurso de la narración. Y me pregunto
si a pesar de recordar, sabemos en realidad quiénes somos y si el nombre que
llevamos es el nuestro, el que merecemos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">También tenemos
otro personaje que al ver a su abuela sufriendo en esos días difíciles,
delirantes, previos a la muerte, preferiría estar loco como su tío, para no ver
la realidad o para verla con otros ojos. Un personaje, como muchos, me sumo a
esa incertidumbre, que no comprendemos aún la muerte ni lo haremos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">La tarea de
escribir, tratando de huir de todo, viviendo realidades alternas, complejas, es
otro de los temas del libro, donde un nuevo personaje plantea preguntas en las
que se recrimina por no poder escribir
los grandes cuentos que se había prometido. Quería ser una persona diferente a
la que se estaba convirtiendo, a veces el día a día te termina por ganar la
partida, pero lo peor es que odia al tipo en que se estaba convirtiendo, lo
desprecia. Y sus días son miserables. Aquí el autor refleja una de las
preguntas que planteaba en un inicio sobre la tarea de escribir, esa gran
diferencia entre escribir mal y bien y sobre todo entre escribir bien y el
verdadero arte, como lo propone Truman Capote, diferencia brutal, de eso no nos
queda duda. Pero también la idea de estar haciendo algo que no nos termina de
convencer, de trabajar para alimentarnos, donde el gusto por lo que verdaderamente
uno quiere hacer se pierde, y te
carcome, llenándote de inseguridades, ansiedades lacerantes. Y más aún si vives
en un país donde dedicarte a la literatura, es una verdadera odisea, una tarea
titánica. Conversando con Orlando Mazeyra, coincidimos en que si uno pretende
escribir termina con el tiempo destruyéndose. Es inevitable pero necesario. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Asimismo, Mazeyra
nos relata la primera vez de un muchacho: esa experiencia única, rocambolesca,
traumatizante, inolvidable, quien despierta con la voz de una mujer desnuda,
los tragos le han ganado, y ella insiste en preguntarle si es su primera vez,
diciéndole: «Pero dímelo, ¡ya pues, dímelo!... quiero escuchar tu voz, ¿con
quién has tenido tu primer polvito?». La
mujer, como habrán sospechado o empiezan a sospechar, es una mujer pagada por
sus servicios sexuales o una prostituta, como prefieran decirle. No importa en
este caso. Pues el relato trata sobre la añoranza de la infancia y que me hace
pensar en una frase de Henry Miller, sacada del libro <b><i>Trópico de Capricornio</i></b>, y
cito: <b>«Me dan ganas de
llorar al pensar en lo que la vida ha hecho
de ellos. De niños eran perfectos…»</b>. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span lang="ES" style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Luego sigue una historia atípica, la de un hombre que
sufre de la vista, con el ojo derecho ve perfectamente, pero con el izquierdo
aparentemente ve cosas que él no desearía ver: esas verdades ocultas, como la
de una mujer que fue infiel y que le oculta a su esposo una enfermedad que la
llevará a la muerte. Después seguirán microrrelatos, historias cortas, de
palabras controladas, medidas, calculadas, como confesiones en un diario; idea
que en el siguiente cuento se expande, desarrollándose con la prolijidad de un
narrador de raza, en la confesión de un supuesto asesino, historia que en un
principio parece resumirse a un simple ajuste de cuentas pero que con el
transcurrir de las páginas toma un giro inesperado, sorprendiendo al lector. Es
sin duda, desde mi punto de vista claro está,
uno de los cuentos más logrados junto con <b>«¿Y ahora qué mierda quiere?»</b>, <b>«Cierra
los ojos y muere»</b>, <b>«Escribes»</b>, <b>«Mi primera flaca»</b> y también el cuento
que le da el nombre a este libro: <b>«Urgente: Necesito un retazo de felicidad»</b>. Y
ya saben los interesados pueden llamar al
teléfono: (054) 256290, como bien se señala en la portada.</span></span><br />
<span lang="ES" style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></span>
<br />
<div style="text-align: right;">
<span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><i><b>Gustavo Pino</b></i></span></div>
</div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-70349257052954665242018-09-20T06:31:00.001-07:002018-09-20T06:31:59.425-07:00Presentación de URGENTE: NECESITO UN RETAZO DE FELICIDAD<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: 15.6933px; margin: 0cm 0cm 8pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; line-height: 17.12px;">El jueves 20 de setiembre, a las siete de la noche, se presentará en el Festilibro del Parque Libertad de Expresión de Umacollo el libro <b><i>“Urgente: necesito un retazo de felicidad”</i></b> de Orlando Mazeyra Guillén. El ingreso es libre.</span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9FJzMN9BJZvZHUyi6FSLiPvNrOY4_uW61ZHLCzgYv41cFz32EzWzW7CLdhkEFFeMvZBKEyPAO1RvBB2Sffn-_YvCAtl5egrnETvUhQC2trSUe8dMoVpo6igGVKyRgn1kFR1WLEg/s1600/presentacion2028.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="748" data-original-width="480" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9FJzMN9BJZvZHUyi6FSLiPvNrOY4_uW61ZHLCzgYv41cFz32EzWzW7CLdhkEFFeMvZBKEyPAO1RvBB2Sffn-_YvCAtl5egrnETvUhQC2trSUe8dMoVpo6igGVKyRgn1kFR1WLEg/s400/presentacion2028.jpg" width="256" /></a></div>
<br />
<div class="m_8101678968935032831gmail-MsoNoSpacing" style="background-color: white; color: #222222; font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; margin: 0cm 0cm 0.0001pt; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt;">Sobre este libro, el escritor Alfredo Herrera Flores ha señalado: “</span><b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt;">sería injusto decir que las historias de Mazeyra alimentan nuestra pesadumbre o pesimismo, por el contrario, nos muestran una alternativa para indagar por la esperanza. La ambigüedad con que nos ofrece la anécdota, parece llevarnos por falsos caminos hacia el desenlace inesperado y más dramático que la propia historia, pero no hay trampas, inevitablemente desembocamos, personajes y lector, en la necesidad de superar nuestra desgracia y ser felices. Los cuentos de Mazeyra nos llevan a la ilusión de la felicidad</span></b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt;">”.</span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-15210772629965885472018-06-10T08:29:00.000-07:002018-06-10T08:29:10.584-07:00¿Por qué amamos el fútbol?Hoy, domingo 10 de junio de 2018, a sólo 4 días del Mundial Rusia 2018 escribo en el diario <i><b>El Pueblo</b></i> acerca de esta pasión. Acá un fragmento:<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnvmXmHcoGrOFJmk2fGS4BLR7x2IEx0dJ5QVNZCC9tnxeoJh1FOildXnqeXfoc-9adOZiKrf5g-Je1KqkN5CbYzHFopo003I1WhtZOlpat298Kx8U-ooL2G7xTavTEWpTW6gHUfw/s1600/diego1994-2018.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="765" data-original-width="1366" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnvmXmHcoGrOFJmk2fGS4BLR7x2IEx0dJ5QVNZCC9tnxeoJh1FOildXnqeXfoc-9adOZiKrf5g-Je1KqkN5CbYzHFopo003I1WhtZOlpat298Kx8U-ooL2G7xTavTEWpTW6gHUfw/s320/diego1994-2018.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; line-height: 107%;"><b><span style="color: red;">En el colegio no solía encontrar carpetas para zurdos. Era un problema.
Un profesor recomendaba aprender a escribir con mano derecha para no tener
inconvenientes. «La siniestra es del diablo», comentaba un hermano de La Salle
con un gesto de amonestación. Sin embargo… ¿no eran Cueto y Maradona zurdos?
Pegarle con la izquierda era un premio. Natura había sido generosa. Se sentía
un poquito más cerca de aquellos genios del fútbol. Alguna vez había escuchado
que su abuela paterna —la mamá Julita— le dijo «poeta» a Cueto… «Poeta de la
zurda», vaya elogio. ¿Algún día alguien le diría una frase tan hermosa? </span></b></span></blockquote>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-76993658203514819872018-04-10T07:12:00.000-07:002018-04-10T07:16:26.571-07:00El retorno definitivo a Arequipa de Oswaldo Reynoso<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIdl4bX_Z-T7I2xj5B9h8fYD-aVwjhFNUO6J8v4PrQgq04zPt-hA7y8d2wBX7sAKs0zpMlQskDKsIsIYULsbYwXVYB4CtpiPLMpUGc30vbRj8SefK6kVjjr1NVYrLTDuAix-u2Kw/s1600/reynoso2018-2.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="356" data-original-width="620" height="183" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIdl4bX_Z-T7I2xj5B9h8fYD-aVwjhFNUO6J8v4PrQgq04zPt-hA7y8d2wBX7sAKs0zpMlQskDKsIsIYULsbYwXVYB4CtpiPLMpUGc30vbRj8SefK6kVjjr1NVYrLTDuAix-u2Kw/s320/reynoso2018-2.jpeg" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Oswaldo Reynoso Díaz nació un 10 de abril de 1931. El autor de <i>Los
inocentes</i>, <i>El escarabajo y el hombre</i> y <i>En octubre no hay milagros</i> hoy
cumpliría 87 años. Él había planificado con antelación su retorno definitivo a
su ciudad natal porque, como en el poema de Kavafis que cita en su libro <i>En
busca de la sonrisa encontrada</i>, su tierra natal lo siguió sin tregua (prueba palmaria
de ello es su última entrega: <i>Arequipa lámpara incandescente</i> publicada por la
editorial Aletheya). Por eso, el maestro quería que sus cenizas fueran
esparcidas en el volcán Misti.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">José Caro, poeta huamanguino y amigo íntimo del narrador que vivió su
infancia y juventud en el barrio de San Lázaro –hasta frisar los veinte años–,
ha llegado a la nuestra ciudad para cumplir con el deseo de Reynoso. Además, el
jueves 12 de abril se celebrará un evento denominado “El retorno” en donde
lectores y amigos de la profusa collera de Reynoso lo recordarán. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Sin embargo la mejor manera de recordar a un autor; o, digo mejor, la
mejor manera de homenajearlo es leyéndolo, por eso leamos a Reynoso sin temores
ni anteojeras. Arequipa le debe mucho –sobre todo lectores– y él nunca dejó de
quererla, a pesar de todo. Acá un fragmento que precisamente hace alusión al volcán Misti en donde se esparcirán hoy sus cenizas:</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">: <b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“¿Por qué me miras tanto?, me preguntó en
tono amenazante. No le contesté y miré el cielo. Era azul como el volcán Misti.
Arequipa de eterno cielo azul había cantado con el coro del colegio. Furioso me
lanzó un puñete en la cara y corrió gritando: maricueca, maricueca. Con la
mano, me limpié las lágrimas que corrían lentas pero dolorosas por mi cara de
colegial de doce años. A paso ligero, con respiros fatigados, me dirigí a Selva
Alegre. En ese entonces, hace tantas décadas, no comprendía por qué la
contemplación del rostro de mi compañero de aula me proporcionaba una sensación
extraña y deliciosa. Tampoco llegaba a comprender por qué esta, mi gozosa
mirada, despertaba tanto odio y por qué tenía que ocultarla para no ser blanco
de infamias e insultos. Entre los árboles y jardines, busqué un lugar oculto
para llorar fuerte y romper mis cuadernos; pero no encontré ninguno, pues esa
tarde la Selva Alegre estaba repleta de visitantes. Crucé el canal de agua y
comencé a caminar por La Pampa Polanco. A medida que avanzaba, sin saber adónde
ir, fue perdiéndose el azul del Misti. No era azul. Su color era casi marrón
claro árido y feo. ¿Y el azul majestuoso coronado de nieve que veía desde
cualquier parte de la ciudad adonde se había ido? Me eché sobre la tierra
arenosa y cerré los ojos. Creo que fue en ese instante cuando imaginé una
ciudad desconocida de sol con hermosos cuerpos desnudos, ciudad que siempre he
buscado para encontrar la felicidad sin culpa, sin castigo. Abrí los ojos y el
azul claro del cielo de Arequipa me enseñó el camino para encontrar la
felicidad sin culpa ni castigo”</i></b>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhR17WYD7IwhQfc8ZMOTEeoWrBWHIdfmVxSMrtjaNwM3orE16P2ZiJTYPkEpcqZUopuoMYnnxH5UkpGJZqKTXOnEgdN7R69W0oxQ-NRo2a85gvvT9mX6PRjhL9dxdaIkWK9P3_ucA/s1600/reynoso2018.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="720" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhR17WYD7IwhQfc8ZMOTEeoWrBWHIdfmVxSMrtjaNwM3orE16P2ZiJTYPkEpcqZUopuoMYnnxH5UkpGJZqKTXOnEgdN7R69W0oxQ-NRo2a85gvvT9mX6PRjhL9dxdaIkWK9P3_ucA/s400/reynoso2018.jpg" width="300" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-align: justify; text-autospace: none;">
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;"><br /></span></div>
</div>
<div style="text-align: center;">
Nuevos lugares no hallarás, no hallarás otros mares.</div>
<div style="text-align: center;">
La ciudad te seguirá. Por las calles vagarás,</div>
<div style="text-align: center;">
por las mismas. Y en los mismos barrios envejecerás;</div>
<div style="text-align: center;">
y en estas mismas casas encanecerás.</div>
<div style="text-align: center;">
Siempre llegarás a esta ciudad. Para otro lugar -no esperes-</div>
<div style="text-align: center;">
no hay barco para ti, no hay camino.</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<b>Kavafis</b></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-77441570504415276192017-12-08T07:09:00.002-08:002017-12-08T07:09:45.553-08:00 ¿Tú también lo sientes así?<blockquote class="tr_bq" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><b>[...] </b><span style="background-color: white;"><b>Una persona que escribe en una habitación silenciosa e intenta conectar con otra persona que lee en otra habitación silenciosa –o tal vez no tan silenciosa–. Las ficciones pueden entretener, en ocasiones enseñar o polemizar sobre algún tema. Pero para mí lo esencial es que transmiten sentimientos, que apelan a lo que compartimos como seres humanos por encima de fronteras y separaciones. Hay un montón de industrias cargadas de glamour<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgebL2nC0hn1F4K4xi4-gacsYqYvwpupVgn5M3tCODgrovMQAMbR_4y-MUNqMVckB0jNyMV-Lj9SWscgGnZcMZTDP_IrtuxaLwZST3msaiIGpshPpaImhyphenhyphenL9JBPkZQ1RIK7oja5eg/s1600/ishiguro.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" data-original-height="396" data-original-width="280" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgebL2nC0hn1F4K4xi4-gacsYqYvwpupVgn5M3tCODgrovMQAMbR_4y-MUNqMVckB0jNyMV-Lj9SWscgGnZcMZTDP_IrtuxaLwZST3msaiIGpshPpaImhyphenhyphenL9JBPkZQ1RIK7oja5eg/s320/ishiguro.jpg" width="225" /></a></div>
alrededor de las ficciones: la industria del libro, la industria del cine, la industria de la televisión, la industria del teatro. Pero al final, las ficciones versan sobre una persona que le dice a otra: así lo siento yo. ¿Entiendes lo que digo? ¿Tú también lo sientes así?</b></span></span></blockquote>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Fragmento del Discurso de Kazuo Ishiguro al recibir el Premio Nobel de Literatura 2017.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Se puede leer todo haciendo <a href="https://www.nobelprize.org/nobel_prizes/literature/laureates/2017/ishiguro-lecture_sp.html" target="_blank">clic aquí.</a></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-86102424820547160222017-10-09T20:06:00.002-07:002017-10-09T20:06:48.739-07:00<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYgXohbyEyfivQkBn8B_5gAmgRhOQwr5YV8NzoQfr6HBph6QFOdyzSPt9d7TGOcaky080GL9URKsS-HzhaNlCTXLSrNoyroo0SdDeW4qb2cOiE9WgbXxFQY0hjAlXvE6e_QnYOzQ/s1600/fernandodes.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="374" data-original-width="600" height="246" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYgXohbyEyfivQkBn8B_5gAmgRhOQwr5YV8NzoQfr6HBph6QFOdyzSPt9d7TGOcaky080GL9URKsS-HzhaNlCTXLSrNoyroo0SdDeW4qb2cOiE9WgbXxFQY0hjAlXvE6e_QnYOzQ/s400/fernandodes.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b style="background-color: white; color: #222222; font-family: sans-serif; font-size: 14px; text-align: start;">Fernando de Szyszlo Valdelomar (1925-2017)</b></td></tr>
</tbody></table>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;">No quiero ponerle título a este cuadro. Quiero que me hable él mismo y me diga su nombre. Estoy buscando su voz entre las formas. Sé que ya lo he acabado y está frente a mí, mirándome. A veces pasa con los animales, sobre todo con los perros. Si tienes cierta relación con tu perro, verás que en algunos momentos se sienta frente a ti atentamente, quizá con esa especie de sonrisa con la que miran a su dueño. Y si lo miras tú a los ojos puedes sentir que, en ocasiones, está a punto de hablar. Esa expresión que tiene una persona cuando va a contarte algo importante, sin decidirse todavía. Al final, el perro desiste. Como si, en realidad, no valiera la pena hablar. Como si, después de todo, tampoco fuera tan importante eso que iba a decir. Y entonces quita la mirada, se va, vuelve a actuar como de costumbre, pidiéndote algo, o simplemente echándose a tu lado. Cuántas veces habría sido mejor no haber dicho ciertas cosas. Si uno tuviera que romper ciertos límites difíciles antes de cada frase se habrían dicho muchas menos estupideces en la vida. Habría menos conflictos, peleas y guerras. Menos dolor.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: right;">
<span style="background-color: white; color: #222222; font-size: 14px; text-align: start;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><b>Fernando de Szyszlo Valdelomar, </b><i><b>La vida sin dueño</b></i></span></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-1653720015600007602017-10-09T13:40:00.000-07:002017-10-09T13:41:28.164-07:00 El planeta Trilafon y su ubicación respecto a Lo Malo<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: "helvetica" , "arial" , sans-serif;"><span style="font-size: large;">"Llevo tomando antidepresivos, no sé, un año ya, y supongo que me siento bastante cualificado para explicar cómo son. Están bien, de verdad, pero están bien igual que, por ejemplo, estaría bien vivir en otro planeta que fuera cálido y cómodo y tuviera comida y agua fresca: no es un mal sitio para vivir, pero tampoco es la Tierra de toda la vida, obviamente. Yo ya hace casi un año que no estoy en la Tierra, porque en la Tierra las cosas no me iban muy bien. Me van un poco mejor en el sitio donde estoy ahora, en el planeta Trilafon, y supongo que es una buena noticia para todos los implicados." (D.F.W.)</span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4RL7x7hhbidDtQPzwoi7N6sE7-OR22-U_vxyjAm0_S0M6HoHw9iDzXlj_0Psqw7T8uigVFsfu08xdGurX2ytJxj2nPzk-uZP0adqzBkArCMPCUrt1y9IZq8yxoffFL-SgenTG3g/s1600/DFW.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="418" data-original-width="470" height="283" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4RL7x7hhbidDtQPzwoi7N6sE7-OR22-U_vxyjAm0_S0M6HoHw9iDzXlj_0Psqw7T8uigVFsfu08xdGurX2ytJxj2nPzk-uZP0adqzBkArCMPCUrt1y9IZq8yxoffFL-SgenTG3g/s320/DFW.jpg" width="320" /></a></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-59340318313255411002017-10-05T08:42:00.001-07:002017-10-06T05:20:05.965-07:00Menos mal que (no) está el Pipita...<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgZA-rVfVHmcP1JiHhr32CSDyg71YiV4Uyj9D3G2J28hPHCI6nX-yuSfvnWQXc8M409oq37v6c7n8pk3aVxf4DHl0gCiVtAO5tM5X-_Tc4Dv3zbBDHYMwOC0dvIVyvbzBu0AEW_9g/s1600/pipita.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="361" data-original-width="500" height="288" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgZA-rVfVHmcP1JiHhr32CSDyg71YiV4Uyj9D3G2J28hPHCI6nX-yuSfvnWQXc8M409oq37v6c7n8pk3aVxf4DHl0gCiVtAO5tM5X-_Tc4Dv3zbBDHYMwOC0dvIVyvbzBu0AEW_9g/s400/pipita.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Luego de fallarse goles hechos ante Alemania y Chile le dedicaron este meme a Gonzalo Higuaín.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Primer tiempo<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Hace
un año (para ser exactos, el 6 de octubre de 2016) estaba en una tribuna
popular del estadio Nacional viendo un intenso partido Perú-Argentina con mi
amigo Aldo Medina. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Él,
que sabe que soy ferviente seguidor del fútbol argentino –yo había estado el
año 2015 en el Camp Nou viendo a Mascherano y a Messi–, me dijo, con tonito
cachaciento: <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">–Menos
mal que lo pusieron al “Pipita” Higuaín.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">–¿Por
qué?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">–Porque
no le hace gol ni al arcoíris…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Ni
bien terminó de lanzar su pachotada, ambos vimos cómo Higuaín entró al área y
con la categoría de los grandes definió ante la apresurada salida de Pedro
Gallese. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Así son los cracks: aparecen cuando menos se los espera. Ahí
nomás: a unos cincuenta pasos de nosotros parecía que Argentina nos ganaba otra
vez (Perú no le gana en Lima a Argentina desde 1985 y jamás le ganó en Buenos
Aires, por eliminatorias). Pero apareció el mejor delantero peruano que yo,
modestamente, he visto: Paolo Guerrero. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Al final del partido ya no hablábamos
de Higuaín, ni de Mascherano (que tuvo un error grosero y provocó el segundo peruano de penal), ni de la ausencia de
Messi; hablábamos de cómo la bajaba de pecho Paolo Guerrero.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Al
día siguiente, por la noche, presenté un libro en la librería El Virrey y les
dije que lo único que me interesaba escribir era sobre cómo dominaba el balón
Guerrero: que luego hizo lo mismo contra Uruguay: ponerse en “Modo Avión”,
ingresar al área, controlar el balón y hacer parecer un marcador amateur al
capitán uruguayo Diego Godín. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Hoy, en la mítica Bombonera de Buenos Aires (el patio de la casa de Juan Román Riquelme), no estará el “Pipita”, tampoco Agüero.
Argentina colectivamente es muy pobre para los nombres que tiene porque, está
claro, individualmente están por lejos por encima del resto con Brasil. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">El
único peruano que jugaría hoy en Argentina –o Brasil o Uruguay– sería Paolo Guerrero.
Los demás, no. En la previa lo sensato sería firmar el empate, pero los desbordes
y la ilusión generados hacen creer en un triunfo histórico.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Segundo tiempo<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Esta
es la última fecha doble: son dos tiempos o dos partidos. Todo se define en
Lima contra Colombia. Y precisamente, antes del Perú-Argentina del año pasado,
estuve en el Perú-Colombia del 2012, clasificatorio para Brasil 2014. Otra vez
en la tribuna popular, y otra vez con mi amigo del cole Aldo Medina, que
siempre me acoge cada vez que paso por Lima. Parecía que se podía pero Farfán
comió algo (o hizo algo) y no arrancó. Había un clima anómalo. Al final
apareció un chibolo llamado James Rodríguez a quien no conocía, la verdad. Hoy
es un crack de Bayern Munich.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;"><b>Tiempo
extra<o:p></o:p></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: large;">Respeto
el entusiasmo de muchos peruanos. De la prensa deportiva ya nada me sorprende:
las portadas de siempre, como hace veinte años. No hubo la hostilidad de Santiago en Chile en 1997. Pero está Messi, que es el mejor del mundo, y yo
firmo el empate. Aunque en realidad quisiera que la tabla se quedara inmutable.
Acá se sueña con ir al Mundial dejando fuera a Argentina. Yo creo que la nota
va por otro lado: dejar afuera a Chile. Difícil pero posible.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-50277155847680255502017-09-30T10:12:00.000-07:002017-10-01T14:08:52.195-07:00Profe Juan Reynoso: Melgar y Arequipa se lo agradecen<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhu76kcTCwZ_FL9Tu7bn7CPxkcvNGGgKRw3J-gfJeZE6l5hAHPXP17q-zWvQJ_6jja1Ouv_N9wKSAhFBHOazg2f0Mzfa7tL7li-83r8ifQLe0KoPfyYyI9KzruWsCzrFT95kEfaXw/s1600/reynoso.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="901" data-original-width="1600" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhu76kcTCwZ_FL9Tu7bn7CPxkcvNGGgKRw3J-gfJeZE6l5hAHPXP17q-zWvQJ_6jja1Ouv_N9wKSAhFBHOazg2f0Mzfa7tL7li-83r8ifQLe0KoPfyYyI9KzruWsCzrFT95kEfaXw/s400/reynoso.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Juan Máximo Reynoso Guzmán llegó a Melgar el 2014. Fue campeón nacional el 2015 y subcampeón del 2016, sin perder en ninguna de las dos finales.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; font-family: "times new roman" , serif; font-size: 12pt;">Se va nomás nuestro entrenador: Juan Máximo Reynoso
Guzmán. Es el director ténico más exitoso de la historia del club rojinegro:
Ganador del Clausura 2015, Campeón Nacional del año 2015, Subcampéón Nacional
2016 (sin perder en las finales ante Sporting Cristal) y Campeón del Torneo de
Verano 2017, que clasificó a F.B.C. Melgar a la Pre-Libertadores de América del
2018. </span><br />
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Pedí su cabeza luego de los papelones en la
Sudamericana y, después, en la Libertadores (seis derrotas el año pasado). Le
reclamé tantas rotaciones y otras cosas que no vienen al caso. Pero yo no soy
entrenador, apenas un hincha más, que también supo defenderlo cuando, por
ejemplo, ya pedían a Mosquera que terminó por las patas de los caballos en el
Monumental de River: “van a extrañar a Reynoso”, les advertí y su salida marca
el fin de una era: hay un antes y después de Juan Reynoso con el buzo de
entrenador del club más grande del fútbol arequipeño.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Cuando era un corito que se dedicaba a jugar pelota
en el parque de su barrio, la pregunta recurrente era: ¿podré, alguna vez, ver
campeón a mi equipo? ¿Será posible que volvamos a jugar la Libertadores en
Arequipa? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Los primeros relatos que escribí en la época escolar
iban de eso, mi primera pasión: el fútbol, mi equipo y, claro, la revista “El
Gráfico” de Argentina que coleccionaba con devoción religiosa. Acabó mi
infancia y también mi juventud. Me hice adulto. Sin embargo, el sueño seguía
ahí, agazapado y expectante: ¿seré alguna vez campeón? En el 2014, llegó
Reynoso con un proyecto no serio, sino serísimo. Apostó por Arequipa (luego
sabríamos que tenía ancestros arequipeños). Aquella temporada fuimos los
mejores del año y nos quedamos sin nada. El entrenador sabía que era un
proyecto a largo plazo. Paciencia y mucho trabajo. Y así fue. Se vino el
centenario, otro papelón en la Sudamericana y más insultos. El retorno de
Cuesta y un equipo que nunca perdió en casa y castigó en Lima. Y era verdad: no
quería que nadie me despertara. ¿Melgar campeón? ¡Putamadre! ¿Era posible tal
cosa? Todavía sigo repitiendo mentalmente el gol de Cuesta y a todo el plantel
(titulares y suplentes) agolpándose, rodeando a su entrenador, dándole las
gracias y diciéndole que contra todo y contra todos se pudo. Y ahí está Fito,
recordándome que hay personas que no voy a olvidar. Profe Reynoso, gracias por
tanto. Usted está por encima de las mezquindades y, sobre todo, por encima de
los giles que nunca van a la tribuna. Juan Máximo Reynoso ya está en lo más
alto con Máximo Carrasco (el timonel de la gesta histórica del 81). Espero que
vuelva siendo más grande y que mi equipo crezca tanto como usted.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt;">Ya me imagino la primera frase que dirá cuando
pegue la vuelta: “Cuando me fui, no me alejé”. Ojalá, Profe. Melgar y Arequipa
(su segunda casa para siempre) le dan las gracias.<o:p></o:p></span></div>
</div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<iframe allowfullscreen="" frameborder="0" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/yyc2UWdnqpQ" width="560"></iframe>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-38203915839358638432017-09-05T08:42:00.001-07:002017-09-05T09:02:08.148-07:00Vuelve el Hay Festival Arequipa del 9 al 12 de noviembre<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAhuBPIzFUONc828myvJutzv4N0jyBZ0T5Ymsz0tysflBGblQj0HNhSc7qL67rTCFiosLtgkokw3_EN0bUfYFZ-Q2tB84Py0hTbVP0zqMpfXH_V17llWQzDMUCP1izXvkK96JLkw/s1600/hayfestival2017.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="916" data-original-width="960" height="305" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAhuBPIzFUONc828myvJutzv4N0jyBZ0T5Ymsz0tysflBGblQj0HNhSc7qL67rTCFiosLtgkokw3_EN0bUfYFZ-Q2tB84Py0hTbVP0zqMpfXH_V17llWQzDMUCP1izXvkK96JLkw/s320/hayfestival2017.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Dentro de dos meses
vuelve el <i><b>Hay Festival</b></i>. En Arequipa la cita será del jueves 9 al domingo 12 de noviembre y -sin duda un gran acierto de los organizadores- se
prolongará un día más para una fecha a realizarse en Cusco el lunes 13. Entonces, lo
primero que hay que felicitar es este afán descentralizador del evento. El año pasado,
por ejemplo, tuve la oportunidad de estar en Moquegua e Ilo, y la experiencia
fue enriquecedora.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Personalmente, puedo
decir que lo que más me alegra es la presencia de un narrador notable como el
español <b>Javier Cercas</b> (1962), quien saltó a la palestra gracias a su famosa
novela <i><b>Soldados de Salamina </b></i>(2001). Pero tiene otras entregas muy interesantes
como la novela <i><b>El impostor</b></i> (2014) y su libro de ensayos <i><b>El punto ciego</b></i> (2016), en donde se aproxima a las novelas
que lo marcaron como lector y escritor y llega a la conclusión que la
novela no es el género de las respuestas, sino el de las preguntas. Se trata,
pues, de las conferencias que dictó en la Universidad de Oxford el año 2015. En la página de la Real Academia de la Lengua española pueden leer el magnífico y agudísimo ensayo que le dedica al novelista arequipeño: <a href="http://www.rae.es/sites/default/files/Epilogo_Javier_Cercas_La_pregunta_de_Vergas_Llosa.pdf" target="_blank"><b><span style="color: red;">"La pregunta de Vargas Llosa"</span></b></a>, que aparece en el epílogo de la edición celebratoria de los cincuenta años de <i><b>La ciudad y los perros</b></i>.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Cercas llega a Arequipa con una nueva novela: <i><b>El monarca de las sombras</b></i> (2017).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">También desde España
llegará el periodista del diario madrileño <i>El País</i> <b>Juan Cruz</b> (1948), gran
entrevistador y amante del fútbol y la literatura. Es uno de los más atentos lectores de la obra de Mario Vargas Llosa, a quien conoce muy bien y ha
entrevistado infinidad de veces.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Entre los
representantes peruanos destaca el narrador <b>Edgardo Rivera Martínez</b> (1933), autor de
la ambiciosa novela <i><b>País de Jauja</b></i>, quien vuelve luego de muchos años a Arequipa
luego de su presencia en la desaparecida FIL Arequipa.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Asimismo vuelve Renato Cisneros,
un auténtico y merecido éxito de ventas con ese libro que hibrida la novela con el
reportaje <i>La distancia que nos separa</i> (y que acaba de publicar una novela que
puede leer como la precuela del libro donde aborda la relación con su padre:
<i><b>Dejarás la tierra</b></i>, un título sugerido por Alberto Fuguet).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Vale la pena resaltar
la presencia de <b>Katya Adaui</b> quien, luego de una maestría en Escritura Creativa
en la Universidad Tres de Febrero de Buenos Aires, ha publicado un conjunto de
narraciones titulado <i><b>Aquí hay icebergs</b></i>. Hacía mucho tiempo que no leía un libro
con relatos tan originales y logrados. Hay que leerla.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Otro autor de primera
fila que llega es el holandés <i><b>Cees Noteboom </b></i>(1933) cuya prolífica obra ha hecho
que sea voceado, año a año, como candidato al premio Nobel de Literatura (él
bromea al respecto de que se lo darían por “causas humanitarias”, pero de
ocurrir, afirma, se pondría a llorar).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Sin duda, la lista es bastante larga: son más de un centenar de invitados provenientes de más de 20 países.
Podemos citar a la argentina <b>Claudia Piñeiro</b>, a la mexicana <b>Guadalupe Nettel</b>, a
la peruana <b>Carmen Ollé</b>.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Hay quienes se
preguntan por qué todavía no viene al Hay Festival el arequipeño universal, yo
les recuerdo que el <i>culpable</i> de que tengamos este evento es él. Y, como cada
año, hay que darle las gracias.<o:p></o:p></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">Esperamos, eso sí, que
para las siguientes versiones se tengan en cuenta a más narradores que no sean sólo
de la capital.</span><span style="font-family: "times new roman" , serif; font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 107%;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><br /></span></span></div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-11380690803755139812017-08-17T22:15:00.003-07:002017-08-17T22:15:51.137-07:00Conversatorio sobre Mario Vargas Llosa en la Librería SBS<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLqlOsCvRTJcQ7TYw2Uyk5GCQNQxOexSnVLVorqgiQTkwrj0gAupWw_oR-JjZTOBbPFdWDDIKGIIs90WslSNovV4vk8voxAAW5P7XT0k7DoOqBMHzqBrbR_R1Lrg30n-150RMEFg/s1600/conversatorio-mvll-sbs.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="960" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLqlOsCvRTJcQ7TYw2Uyk5GCQNQxOexSnVLVorqgiQTkwrj0gAupWw_oR-JjZTOBbPFdWDDIKGIIs90WslSNovV4vk8voxAAW5P7XT0k7DoOqBMHzqBrbR_R1Lrg30n-150RMEFg/s400/conversatorio-mvll-sbs.png" width="400" /></a></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
El sábado 19 de agosto, a las seis de la tarde, participaré en el Conversatorio <b><span style="color: red;">"Influencia del escritor Mario Vargas Llosa en la literatura"</span></b>, que se llevará a cabo en la <b>Librería SBS Arequipa </b>de la calle San Francisco 125 del Cercado de Arequipa.</div>
<div style="text-align: justify;">
Están todos cordialmente invitados. </div>
<div style="text-align: justify;">
El ingreso es libre.</div>
Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7804947.post-68565958080762239192017-08-09T09:46:00.000-07:002017-08-09T09:46:05.958-07:00<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEioI_XEJuKAAXjqOvUa20FhvvJZTpcBQyug6woVe7nikmRIzuh94KBmEMEwqgKVbvZeKvuDTtoR5FWCftQz0PhWebiQSC0LqFpD84QT5tb4U4qJi7mG5MGIhq8Ars5Xka9yiB6WSw/s1600/FBC-MELGAR.png" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="363" data-original-width="960" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEioI_XEJuKAAXjqOvUa20FhvvJZTpcBQyug6woVe7nikmRIzuh94KBmEMEwqgKVbvZeKvuDTtoR5FWCftQz0PhWebiQSC0LqFpD84QT5tb4U4qJi7mG5MGIhq8Ars5Xka9yiB6WSw/s400/FBC-MELGAR.png" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Contra todo y contra todos: somos F.B.C. Melgar, somos Arequipa.</td></tr>
</tbody></table>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: Georgia, "Times New Roman", serif;"><b>–Somos once contra once.</b></span></div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129;"><b>–Sigue hablando, idiota…</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129;"><br /></span></div>
<span style="background-color: white; color: #1d2129;"><div style="text-align: justify;">
A ver, lo de Deportivo Municipal no es nuevo: es reincidencia. El año pasado, Lavandeira se agarraba los testículos mirando a la tribuna. Él no fue el único que provocó. Vienen predispuestos a causar problemas. Ahora Ameli se desubica, provoca a Reynoso. Tratan de calmarlo y nada. Viene Rabanal, a toda velocidad, con el codo por lo alto para atacar a Ortega y éste, ante la agresión, responde. ¿Eso no haría cualquiera?</div>
</span><span style="background-color: white; color: #1d2129;"><div style="text-align: justify;">
Pregunto<span class="text_exposed_show" style="display: inline;">: ¿les parece que da para 12 meses de sanción a Ortega y que a Rabanal sólo lo suspendan 3 fechas?</span></div>
</span><span class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline;"><div style="text-align: justify;">
Esto es un circo. El dueño –los dueños, esos mismos que juran que Perú puede ir al Mundial ganando en mesa– del circo ya sacó de carrera a Garcilaso para que campeone Alianza Mesa y ahora, con semejante decisión, está sacando a Ortega del cargo. Están dejando a Reynoso sin mano derecha para que se vaya. Así es la nuez. Mejor que armen un cuadrangular en la capital con puro equipo limeño. Sería más honesto… como al comienzo, cuando sólo jugaban entre ellos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Repudio a la gente del Deportivo Municipal (“serranos de mierda”, nos dicen desde la cancha) y a la Comisión de Justicia que, una vez más, nos recuerdan cómo son los equipos limeños. Y luego tienen la concha de hablar de insultos racistas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</span></span>Orlando Mazeyra Guillénhttp://www.blogger.com/profile/04555962925876557456noreply@blogger.com0