2010/07/28

Yo me vengo reinventando y lo tengo que hacer porque me lo exige mi cabeza

Escribe Daniel Arcucci

Quizás ahora sí sea posible hablar y escribir acerca del futuro de Maradona -esa persona, no ese personaje- sin escuchar o recibir comentarios del tipo "¡¿Y a mí qué me importa el futuro de Maradona?! ¡Yo quiero un DT!" , generalmente escrito en mayúsculas, como para reafirmar que si se estuviera conversando sería a los gritos.

Ya está. Maradona ya no es el DT. El mito sigue y el hombre queda.

Y como durante los 630 días que duró este ciclo (parecen años) de esa tríada ya nos hemos ocupado lo suficiente del mito y del DT, bueno será ocuparse de lo que puede pasar ahora con el hombre, que quizás a alguno aún le importe.

Planteado de otro modo, si asumiendo como técnico del seleccionado Diego ponía en riesgo el mito Maradona, ¿qué riesgo asume el hombre ahora que ya ha dejado ese lugar, el más terrenal de los oficios futboleros?

En ese sinfín de frases memorables (no todas para aplaudir, claro) que es su vida casi siempre pública, se ofrece como oportuna respuesta a aquella pregunta una que pronunció no hace mucho, el día de su primera conferencia de prensa en Pretoria: "Yo me vengo reinventando y lo tengo que hacer porque me lo exige mi cabeza" , dijo entonces, y es lo que podría repetirse a sí mismo ahora.

Sí que era crucial el desafío que asumía. El más crucial de su carrera, porque los anteriores los había afrontado con el talento contrastado en pantalones cortos y botines y éste debía afrontarlo con un talento por verse en incómodo traje y zapatos. Y porque en su vida de "blancos" y "negros" no iba a dejarse lugar -ni se lo iban a dejar- para los "grises" . Su balance más íntimo y en caliente, todavía con los pies en Sudáfrica, fue una confesión y un indicio: "Lo que más me duele es que los sigo desilusionando" , les dijo a los que más quiere.

El Maradona DT se autodestruyó estratégicamente: primero, en el momento decisivo del Mundial, cuando llevó su teoría jugadorista al extremo de la ceguera; después, ya en Buenos Aires, cuando movió todas las piezas de manera sorprendentemente equivocada para entregarse al jaque mate. Si esto último lo hizo inconscientemente, para que la partida terminara como terminó, es meterse en pretenciosas honduras.

El Maradona hombre, mientras tanto, necesita consolidar su reconstrucción. Y para esto quizá sirva una frase más elemental, pero bienintencionada, de Fernando Signorini, al fin y al cabo una de las llaves de su salida: "En estas condiciones, lo mejor que le podía pasar a Diego era que todo esto se terminara" . Ojalá.

2010/07/12

Y ahora... a soñar con Brasil 2014

‎"¿Será verdad que estoy metiendo un gol en la final de un mundial o, acaso, se trata de otro sueño? Es el temor a que tu madre te despierte..."
(Jorge Valdano, campeón del mundo 1986).
"Dani Jarque, siempre con nosotros", un genio hasta para las dedicatorias.

Se acabó el Mundial y habrá que esperar otros cuatro años. Brasil 2014 es la próxima cita (y aunque parezca broma, soy tan imbécil como para soñar con el Perú en el Mundial. Fútbol, pues: "ladrón de mi cerebro").
Y, sí, hay que reconocerlo. Aunque joda (¡y cómo jode, cabrones!). Robben la tuvo dos veces, por favor, que no le dejen volver a Holanda. ¿Cuándo vas a desahuevarte, Holanda? ¿La tercera no era la vencida?
Esta 'naranja mecánica' capaz de tumbar a Brasil, no pudo matar a España. Insisto: por culpa del maldito Robben y de Casillas (un buen portero, no el mejor del mundo, que tiene mucha fortuna; mejores fueron el nigeriano Vincent Enyeamá y, claro, Ricardo, el notable guardameta portugués).
Esta España, juega mejor, pero -estoy seguro, no me cabe la menor duda- no hubiera podido con el sólido bloque posterior de Brasil.
No me gustó que la prensa española tratara tan mal a Maradona. Está claro que así como le temían a Brasil, también veían a Argentina como un problema. Por eso cuando Alemania apabulló a una irreconocible selección albiceleste, el consenso de los especialistas españoles era: "zafamos, a los alemanes sí les ganamos". Claro, ya lo habían hecho en la final de la Eurocopa, con gol de un Niño Torres que, ¡ay!, fue lo más bajo del equipo de Vicente del Bosque.
Una pena también por Robin Van Persie, quien, en la previa, había confesado su admiración por el más grande futbolista de la historia: "El video de Maradona levantando el trofeo y llorando, me obsesiona. No les puedo decir cuántas veces he visto esa grabación", dijo el delantero holandés.
La inspiración del ariete naranja era la foto de Maradona que todavía no podrá reemplazar por la suya: "Pero desde entonces, siempre quise jugar una final de Mundial, incluso cuando era un niño. De hecho ahora tengo una imagen grande de Maradona en una de las paredes de mi casa. Es una foto increíble en la que él sostiene la Copa del Mundo". Y, claro, nunca estuvo en mejores manos. Que la sigan mamando los anti-Maradona.
En la previa, sabía que Villa es un goleador nato y no quería que marcara más (hubiera sido el goleador del mundial). No lo hizo, por suerte. También intuía que el único capaz de hacer una jugada 'maradoniana' era el pelado con pinta de oficinista (como lo llama César Luis Menotti). Tampoco la hizo. Pero, jode decirlo, jode mucho. Es el mejor del mundo. Será por eso que Messi funciona tan espléndidamente en el Barcelona. Con este ingenioso hidalgo cualquiera puede brillar.
España no es la mejor selección del mundo, ha ganado el Mundial, pero no es la mejor. El autor del gol sí, no hay duda, es el más grande. Y los grandes aparecen en los mundiales. Zidane, maestro de maestros, ya te tomaron la posta. Acá hay talento, demasiado. Y la dedicatoria lo hace más grande que toda España.


¿Quiénes fueron los mejores?


Mejor arquero: Ricardo (Portugal), nunca voy a olvidar sus lágrimas.
Mejor defensa: Lucio (Brasil), el gran capitán, un guerrero de primera fila.
Mejor volante: A.I. (el mejor futbolista del mundo, digno heredero del 'monje' Zinedine Zidane).
Mejor delantero: De lejos, Diego Forlán, un mercenario del gol.
Mejor entrenador: Gerardo 'El Tata' Martino.



Maradona en Oxford, sí, con toga. En 1995, una universidad de la mismísima Inglaterra le otorgó el título de "Master Inspirator", por considerarlo un "maestro inspirador de los que todavía sueñan". ¿No lo creen? Pregúntenmelo a mí o mejor a Van Persie. Diego: YO SUEÑO.

2010/07/02

Maradona by Kusturica: "La mano de Dios"